Quisiera pintarte en palabras, un lienzo de mi alma,
donde tus abrazos son colores que calman.
Un mar de emociones, profundo y sin calma,
que guardo en mi pecho, como un secreto sagrado.
Tus ojos, dos estrellas que iluminan mi noche,
me han visto llorar, reír, y hasta perder la voz.
Y aunque quisiera contarte cada cicatriz,
temo herir tu alma, con mis pesares y mis florez.
Gracias por quedarte, cuando el mundo se derrumbaba,
por ser ese refugio donde mi alma descansaba.
En tus brazos encontré un puerto seguro y sereno,
un oasis en medio de mi desierto interno.
Y aunque no siempre lo expreso con palabras,
sé que sientes mi gratitud, en cada suspiro, en cada abrazo.
Eres ese bálsamo que cura mis heridas,
la razón por la que sigo creyendo en la vida.
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Entre Ausencias y Recuerdos
PoesíaEn estas páginas encontrarás un eco de las despedidas, un mapa de los corazones rotos y un reflejo de la soledad que a veces nos acompaña. ¿Alguna vez has sentido la punzada de la ausencia? ¿Has anhelado la cercanía de alguien que ya no está? Cada v...