Una estrella por cada 100 lagrimas

capitulo 1.-

____ POV.

· Flash back

- Abuelita... - dije con mis ojos rojos y con ambas rodillas heridas –

- ¿¡mi niña que te ocurrió!? – dijo muy preocupada y acercándose a mi rápidamente –

- Me caí mientras iba en la bicicleta abuelita – respondí secando algunas lagrimas que estaban a punto de salir –

- Ven mi niña, entra a la casa, iré por el botiquín –

- Está bien abuelita – respondí entrando a la casa eh inmediatamente sentándome en el sofá –

- Vamos a tener que echarte alcohol para desinfectar la herida, te ardera solo un poco – me dijo con el botiquín en las manos buscando lo necesario para sanar mi herida –

- No te preocupes abuelita, soy una niña muy fuerte – dije cerrando mis ojos para no ver cuando me echaría el alcohol –

- Está bien, esto será rápido –

- Abuelita me duele... me arde mucho abuelita –

- Espera ya estoy a punto de terminar –

- ¿ya paso? – pregunte abriendo mis ojos a punto de llorar –

- Mi niña... ¿quieres llorar? –

- No... -

- ¿sabes?, cada vez que alguien llora mas de cien veces sale una nueva estrella en el cielo nocturno –

- ¿enserio?... –

- Claro, jamás te mentiré mi pequeña –

- ... - no dije nada y solo abrace a mi abuela dejando caer mis lagrimas del dolor que sentía de mis heridas –

- Mi pequeña __ ... -

· Fin del flash back

Pues esa fue la última vez que hable con mi abuela hace doce años atrás... desde entonces mi vida tuvo un giro muy drástico, a los 16 fui obligada a casarme con un chico que jamás había visto en mi vida, aun que... la primera vez que lo vi sentí mariposas revoloteando en mi estomago y en el momento de la boda de lo tonta que era me imagine un cuento de hadas con el chico el cual estaba a punto de casarme... realmente quisiera volver al pasado y haberme fugado de ese horrible día el cual me ataron a una bestia.

Mi nombre es ___ Reeves actualmente tengo 20 años, físicamente soy pálida, tengo génesis de Alexandria (en otras palabras mis ojos son de un tono morado) soy alta, mi cabello es corto hasta los hombros (con un estilo "emo") y es blanco con las puntas de color turquesa. De mentalidad soy muy fuerte, alegre, soy muy directa en lo que quiera decir y trato de nunca estar deprimida. Eh sido así durante 4 años de matrimonio con un animal, ¿pero creen que me importa lo que haga el?, al principio realmente me dolía, pero con el paso del tiempo me fue dando igual, hasta el punto que no le hablo durante semanas o meses, incluso a veces suele llegar a casa con alguna que otra chica fácil o pasado de copas, pero solo me abrigo y salgo de casa para distraerme... uf... bienvenidos a mi vida.

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Ya era de día, el sol resplandecía y las aves cantaban como todos los días de mi vida, suspire y me levante para prepararle el desayuno a mi amado esposo (¿notaron el sarcasmo?), baje a la cocina aun en pijama y le prepare un café acompañado de unos panes tostados y un pastel de fresa, como siempre ordene la mesa, coloque el desayuno donde se sienta siempre y me senté en el sofá a ver televisión esperando a que bajara, en un par de minutos bajo tratando de arreglar su corbata (lo cual al parecer no sabía hacerlo) y se sentó a comer su desayuno, tal como siempre no me dijo ni buenos días ni gracias.