Capítulo #10 {FIN}

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HOLA HOLAAAAAAA 🤧

Último capitulo yaaa😭

Bueno, como dije en el anterior, a pesar de que investigué un poco, no estoy muy segura de cómo se hacen estas cosas en la vida real, así que usaré lo que encontré, y el resto me lo invento.

Bueno, espero les guste el cap.

XOXO.

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-¡¿Donde cojones estás??- le grité a través del teléfono.

Se quedó en silencio...

-Escúchame bien, hijo de la grandísima puta, ¡eres un cabrón¡ Y ya que estás, escondete bien, porque si te veo te juro que...

-Bahia, basta ¿quieres? Déjame en paz de una puta vez. Superalo, Darla y yo nos amamos, y no vas a poder separarnos por más que lo intentes.

-¿¡Y te atreves a mencionarla!? Es que en serio, estoy flipando ahora mismo.

-Si, la mencioné ¿y qué?- dijo desafiante- nos vamos a ir de ese país de mierda, hemos pasado por altibajos pero vamos a supe...

-¡La has matado Iker!- se quedó en silencio al escucharme

-¿Co-como dices?- tartamudeó, se le escuchaba confundido.

-Que la mataste, y vas a pagar por ello, pedazo de imbécil, ¡Te voy a encontrar, y vas a pagar por todo lo que has hecho en toda tu patética vida.- y lo dije en serio, iba a encontrar a Iker, y me iba a reír en su cara al verlo pagando por sus crímenes, o en un hospital psiquiátrico.

Colgué la llamada.

Desde pequeño Iker siempre había tenido ataques de ira, siempre que algo le molestaba acudía a los llantos y la violencia. Por esas inmadureces salí lastimada en algunas ocasiones.

Cuando tenía alrededor de 10 años tomé el celular de mi madre y busqué sobre eso, me apareció una enfermedad mental, Trastorno Explosivo Intermitente.

Nunca lo tomé en serio, ya que mi hermano no podía estar enfermo, nunca dije nada porque temía que lo encerraran en un manicomio o algo así. Ahora me doy cuenta de que todo este tiempo esa enfermedad era cierto, todos los síntomas de esa enfermedad estaban en Iker.

Antes no lo dije por miedo, ahora hablaré porque esto pasó a mayores; mi hermano se convirtió en un asesino, y lo peor es que fue a mí mejor amiga.

Si, Darla murió.

<<Lo siento mucho Bahía, perdón por no haberte escuchado cuando me advertirte. Espero me perdones>>

Las lágrimas volvieron a mis ojos al recordar las últimas palabras de mi mejor amiga. Nunca pensé sentir un dolor así, no lo sentí ni siquiera cuando murió mi padre.

ππππππππππππππππππππ

Salí del hospital con la cabeza baja. Dirijiendome a la casa de los padres de Darla. No me recibieron muy contentos, pero al menos me dejaron pasar.

-Lamento todo esto Dolores, en serio, lo siento- le dije a la madre.

-Bahia, entiendo que tú no seas la culpable del asesinato de mi hija, pero fue tu hermano, ellos se conocieron gracias a ti. Mejor guardate tus disculpas, eso no hará que Darla regrese.-las lágrimas estaban rodando por las mejillas de la señora, y por las mías también.

-Le juro que voy a encontrar a Iker, y va a pagar por esto.

Me fui de esa casa, y volví al depa, como toda una detective armé una tabla de investigación.

Parecía imposible, pero pasó [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora