Parecía imposible, pero pasó [Editando]

Capítulo #1

_¿De donde nos conoces?- preguntaron ambas al mismo tiempo.

_Pues no lo sé, pero yo las conozco- intentaba recordar, pero no me venía nada a la mente- díganme sus nombres, tal vez las recuerde.

_Soy Bahiana Rossell, y ella es mi mejor amiga, Doris D'Angelo- dijo la morena.

Yo estaba en un completo shock, mi mandíbula casi tocaba el suelo

_Eso es imposible, ¿como es posible? Es que... no puede ser- yo tartamudeaba mientras daba vueltas por la habitación- Ya en serio, díganme quiénes son, es imposible que sean Bahiana y Doris.

<<No puede ser, ellas no pueden ser la protagonista de mi libro y su mejor amiga, seguro son unas ladronas y en el momento en el que entraron a mi cuarto leyeron los nombres en mi escritorio>>

_Es que... es en serio, somos nosotras- habló la rubia, por primera vez desde que la ví.

_Dejen de mentir, voy a llamar a la policía- dije y comenzé a buscar mi teléfono, di varias vueltas por la habitación buscándolo, pero no lo encontré. -¿Donde está el puto móvil?

Y mi teléfono, cómo ya es costumbre, desaparece justo cuando lo necesito.

_Hey, por favor no llames a la policía, no somos asesinas, ni ladronas, ni nada de eso- dijo la morena, tratando de calmarme.

_Creo que eso es exactamente lo que diría una ladrona, o una asesina.

_Dijiste que nos conocías, ¿de donde? - preguntó la supuesta "Doris D'Angelo".

_Es que es imposible- casi grité- es imposible que ustedes sean la protagonista de mi historia y su mejor amiga- me senté en la cama, con los codos apoyados en mis rodillas y la cabeza sobre mis manos.

_¿Eres escritora?- se sorprendieron las dos.

_Bueno, se puede decir que sí, voy a una escuela especializada en literatura, me queda solo un año de curso.

_Aver genia, si dices que tú nos escribiste, quiere decir que sabes todo sobre nosotras ¿cierto?- la de los ojos azules habló. - si es en serio, entonces puedes preguntarnos cualquier cosa sobre nosotras, o nuestra vida, y nosotras te contestamos, si contestamos correctamente entonces estará confirmado que sí somos Bahiana y Doris.

_Bueno, eso es imposible, pero..., intentemoslo.

<<Estas chicas están complemente locas, y están poniendo una prueba y todo>>

_Ok, primera pregunta. Bahiana, ¿cuál es tu color favorito?

Bahiana se quedó en silencio dos segundos.

_El verde y el blanco - contestó como si fuese obvio.

_Doris, dime qué carrera estudias

_¿Es en serio?, estudio diseño en la noche y derecho en la mañana.

Me quedé asombrada por sus respuestas correctas, eso lo confirmaba, ¡Si eran personajes de mi libro!, pero yo aún tenía mis dudas, nunca antes había escuchado a alguien decir: "Oye, los personajes de mi libro están en mi habitación", eso solo pasa en cuentos y películas de fantasía.

_¿¡Bahía!?- escuché a mi querida madre <nótese el sarcasmo> gritar desde la sala

_¡Ya voy mamá!- le grité de vuelta. Voltee hacia las intrusas- ustedes dos- las señalé con el dedo- se quedan aquí, quietas, no hagan ni un ruido.

Dicho esto me giré y bajé las escaleras en busca de mi madre.

_Dime mamá - dije al llegar a su lado.

_Necesito ver qué escribes.

Se hizo un silencio que me pareció eterno.

_¿Para qué?

_Para algo que no es de tu incumbencia, solo dame lo que has escrito.

_No.

Mi madre giró el cuello casi 180 grados, al igual que un búho al escuchar mi respuesta.

_¿Como que no? ¡Te pasas todo el maldito día escribiendo y no quieres que yo lea lo que escribes!- me gritó, pero eso no me haría cambiar de opinión.

_Pues no mamá, no voy a dejar que leas lo que escribo.

Se hizo otra silencio. Ella estaba como procesando algo.

_¿Escribes... ¿cosas eróticas?

_¿Qué? ¡No!- aclaré de inmediato- ¿Por qué piensas eso?

_Porque para mí es la única explicación para que no me dejes leer lo que estás escribiendo todo el día.

_Mamá, no quiero que leas lo que escribo porque, tú nunca me has apoyado en mi decisión de ser escritora, y sé que cuando comienzes a leer lo único que vas a hacer es criticar mi forma de escribir, y me dirás que cambie a una carrera en la que sea buena- hice una pausa y limpié algunas lágrimas que de deslizaban por mis mejillas.- Lo siento mamá, pero no te dejaré leer mis historias, cuando te decía que las leyeras solo me ignorabas, y ahora no quiero que los veas.

Subí las escaleras despacio, dándole una oportunidad a mi madre de que dijera algo, pero no fue así. Llegué a mi habitación y ya no me acordaba de que tenía a dos personajes de mi libro allí.

_¿Estás bien Bahía?- preguntó la rubia con una mirada preocupada, fue la primera que notó las lágrimas en mis ojos.

Yo solo me limpié las lágrimas y puse una sonrisa forzada.

_Si, estoy bien.

_Bahía, estabas llorando hace un segundo ¿como me vas a decir que estás bien?

_Dije que estoy bien- le grité exasperada

Me arrepentí al instante de haberle gritado a Doris, ella solo quería ayudarme.

_Yo.., lo siento Doris, es solo que... - me quedé en silencio.

_Está bien, tranquila, pero... Solo dinos que te pasa.

_Es que, mi madre nunca me ha apoyado en mi sueño de ser escritora, ella quiere que me dedique a otra cosa que de más dinero, pero a mí lo que me gusta es escribir, ella no lo entiende- comenzé a sollozar- yo, siempre he hecho lo que ella me decía, sin preguntar o quejarme, pero ya estoy harta, quiero salir de aquí, ya no quiero vivir en esta casa, aquí mi vida es una puta mierda- hice una pausa, pensando.

_¿En qué estás pensando?- dijo Bahiana intrigada y preocupada al mismo tiempo.

_Ya sé que voy a hacer- hice una pausa y puse una sonrisa maliciosa- me voy a ir de esta casa.

Mis dos creaciones se miraron entre sí, espantadas, mientras que yo seguía perdida en mis pensamientos.

_Bahía, no te puedes ir ahora, habla con tu madre, busca un sitio donde quedarte y todo eso, no puedes irte de la nada y ya.

_Claro que no me iré ahora, necesito más tiempo, pero ustedes, no pueden quedarse aquí, tienen que irse, pero no las voy a dejar solas en la calle.

Me quedé pensando a donde podía llevarlas, estuve unos minutos pensando y me llegó una idea.

_¡Claro! ¿Cómo no lo pensé antes?- hice una pausa y las miré- se irán a casa de mi mejor amiga...