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Había comenzado como un juego de niños. Ni yo ni el sabíamos que hacíamos pero ahí estábamos, riéndonos en una mesa de bar que ,además de sucia, era pequeña. Podía notar en sus ojos como la chispa de maldad que veía en Ed el también la poseía, y sin embargo no me importó..no importó porque a pesar de que esa chispa me recordará a el, moríria una y otra vez por ver esa sonrisa deslumbrar la mía por siempre;se rie como ninguno y caminaba como ninguno, era obvio que desde los pies a la cabeza era guapísimo. Mientras que yo...yo sólo era un corazón roto. Mi forma de vestir no se comparaba a la de el. Trajes carísimos y los míos eran aún más baratos que sus cobartas. Sin embargo esa chispa,ese brillo en su mirar cada vez que, lo observaba o simplemente hablaba se hacia más grande, más chispeante... Me hacia creer que,no era malicia como el Ed. sino, ¿amor?...sinceridad?.
Era precisisimo hasta con el pelo enrrollado en una toalla como lo hacen las mujeres,a pesar de que hombre es.
-te ves..precioso.
Soy de las personas que dicen cualquier cosa con sinceridad..para algunos soy un idiota y para otros alguien que se expresa muy crudamente. Así que ahí estábamos mirandonos, chocando ojos desde la lejanía y sin más remedio note lo incómoda que era situación en la que estábamos,nunca me había sentido asi, la incomodidad no era un sentimiento que mi ser tenía en cuenta antes de que el llegara a mi vida.
-oh!! EH mm en la cocina esta la comida ..te la calentaré si quieres.- hacia casi una semana que Harry se estaba alojando en mi pequeña casa,y ya no podía evitar sentir su mirada de otros aspectos..de otra manera. Su forma de ser era divertida y eso necesitaba yo en estos momentos..diversión.
-ya me lo calentaré yo,gracias.

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