Hilos del Destino

Capítulo 39.- Heridas del Alma

---------Sailor Moon y sus personajes son de autoría de Naoko Takeuchi, las canciones usadas se dará crédito a su autor o intérprete correspondiente en sus respectivas apariciones, personajes nuevos y la trama son de mi total autoría--------

La suave brisa llevaba el aroma de las flores hasta ella que sentía como se mecía su cabello, retiro y acomodo los mechones que le tapaban cuando noto a lo lejos una figura corriendo hacia afuera del palacio, suspiro, nuevamente tendría que perseguirla, se levantó sacudiendo su largo vestido de tonos amarillos haciendo que en un destello cambiara a su traje de batalla volviéndose una sombra para la chica que creía ser discreta, la vio llegar a una base que servía de transportadora, sabía a dónde se dirigía así que decidió subir un poco después que ella transportandose hacia el mismo lugar, cuando llegó y termino el destello corrio por el lugar en búsqueda de la chica que ahora se encontraba con un joven en el lago donde se besaban denotando su cercanía

—hay Serenity...

—parece ser que nuestros niños están causando problemas —la chica volteo asustada poniéndose en guardia, no había sentido a la persona que hablaba detrás de ella —tranquila... Deje me presento, soy Kunzite el líder de los Shitennō mejor conocido como el Caballero de la Pureza y el Afecto... Soy uno de los guardianes del príncipe Endymion ese mismo que perdió la cordura por la niña de los cabellos plateados que está en sus brazos... Pero quién es usted hermosa dama?

—yo soy... —la chica miraba al joven de cabello plateado, llevaba consigo una espada corta y una capa blanca añadida a su uniforme gris militar, el cual le daba un aire majestuoso como si de un rey se tratara, se ruborizó levemente mientras sentía como su corazón latía con fuerza —//diablos, es guapísimo// Soy la princesa, guerrera y guardiana del planeta Venus... Así como la líder de las Sailor Shenshis a cargo del cuidado de la futura Reina de la Luna y del Milenio de Plata, la princesa Serenity...

—al parecer nuestros niños están ocupados —Kunzite tomo con evidente nerviosismo un mechón del cabello de Venus acariciándolo con sus dedos —quiere hacerme compañía mientras terminan su travesura?

Mirai se levantó de la cama furiosa tomando una almohada que comenzó a golpear mientras las lágrimas se atoraban en sus ojos, para su fortuna Yuuki siempre se levantaba temprano

—//por qué Nobu por qué?! Yo no te hice nada!!//

Se dejó caer de nuevo sobre la cama dejándose llevar por los recuerdos que cada día eran más y más claros

—Ace!!

podia mirar como sujetaba la mano de un chico al borde de un barranco

—es mi destino... Morir en manos de la persona amada?... —saco una carta que pronto le mostró a la guerrera que estaba sujetandolo

—el as de corazones?!

—te haré una última predicción —su sonrisa tranquila no reflejaba miedo ante la inminente muerte que abrazaba su cuerpo —no encontrarás el amor en toda la eternidad...

Venus abrió los ojos dejando en claro su mirada de asombro mezclada con tristeza

—que pasa? Deberías estar contenta... Amor o deber... Ya no sufrirás ante la idea de elegir uno u otro... —el cuerpo del chico comenzaba a volverse polvo ante los ojos de la guerrera que sin titubear no soltaba la mano del chico —continuar luchando es tu destino... La verdadera batalla aún no ha empezado

Mirai levantó la cara de la almohada viemdo las marcas que habían dejado sus lágrimas

—//todo fue tu venganza Hiromi? Aún el odio como Adonis y Ace viven en ti?// —Decidio levantarse acercándose a la ventana abriendo solo un poco las pesadas cortinas que mantenían la oscuridad en la habitación mientras permitía que otro recuerdo llegará a ella