Tu mirada; Danilo Sánchez

¿No dí suficiente?

capítulo ambientado con "Moral of the Story" de Ashe.

- 28/07/2022

Hace días me siento cansada, cansada de todo, de la gente, de despertar, de vivir.

Me siento apagada, sin ganas de nada, con ganas de matarme y terminar con el sufrimiento.

A veces de la nada, se me junta todo y comienzo a llorar desconsoladamente.

Hace meses no veo a Danilo, solo he visto a Carlos. Cada que él está con Danilo, lo evito e ignoro.

Estoy enamorada de Danilo.

Hablando con mamá, mi mamá real, Adriana, ella dijo; - ¿Cuándo creíste que esto funcionaría? -Dijo que algunas personas se enamoran de las personas equivocadas a veces.- Hay veces, que la gente queda enamorada de las personas incorrectas. Esos errores se cometen, está bien. Podés pensar que estás enamorada, pero estás sufriendo.

Dice que hay veces que es mejor haber amado, y luego odiado, a nunca haber amado.

- Él podría ser un pedazo de mierda, pero no lo es. Solo necesitaba contarte todo esto. -Fue lo que le dije.

DIAS DESPUES. - 07/08/2022

Por fin me había animado a hablar con Danilo.

Estabamos sentados en un banco de la plaza. - Yo no te conocí así.- - Cegado, adicto... Pensé que esto podía hacerse real, pero fui una pelotuda. Pensé que me amabas de verdad, Danilo. -Le dije.

- Yo no te dí señales de nada, nunca. Nunca te dije que me gustabas. -Dijo, frío.

- ¿No te gusto? -Se me quebró el corazón.

- Me gustas.- Admitió.- Pero no quiero que seas mi novia. Siempre estás drogada, boluda, no.

- ¿Y vos? Estoy segura de que te diste un saque de merca antes de venir.

- Si, ¿y?- - Te quejas de algo que vos también haces, ¿entonces, qué sentido tiene?

Me quedé callada, sin observarlo. Me levanté de ahí y me fuí.

- 10/08/2023

Danilo se drogaba todos los días y yo no me quedaba atrás. Eran cinco saques de falopa TODOS los días.

Poco a poco me estaba matando, sola.

- Luna, basta. Por favor, no te quiero ver así, me duele. -Me rogó mamá.

La miré con los ojos rojos por el efecto de la droga.

Me levanté y salí de su casa.

Escuchaba disparos por todos lados, no me importó.

- ¡Ahí, ahí hay una de ellos! -Fue lo último que pude escuchar antes de desplomarme contra el piso.

Miré mi brazo izquierdo, estaba sangrando, pero no me dolía. Escuchaba un pitido largo y fino.

- ¡Luna, Luna! -Gritó Martina y se arrodilló a mi lado. - ¡La vas a matar, hijo de puta! -Le reclamó a alguien.

- No me importa. -Dijo... ¿El Cochi..? Se acercó a mí. Apuntó mi cabeza con el arma.- Nunca me importó esta pendeja de mierda.

- ¡No! - Corrió mi cuerpo a un lado, para que esa bala no impactara con mi cráneo.

- ¡Déjala, Martina!- Gritó él.

- ¡No la mates a ella!- - ¡Mátame a mí, pero a ella no!- Suplicó.

- Ah... ¿sí?- Sonrió. Destrabó la traba de la pistola, apuntó a la cabeza de Martina, y disparó. Eso fue lo último que escuché antes de que me desmayara.

RATO DESPUÉS.

Me desperté, desorientada. Una vez con los ojos bien abiertos y enfocados, ví que estaba en la casa de Carlos.

- Luna- Segundo sonrió al verme despertar.-, ¿te sentís bien?

Intenté pararme del sillón, pero Carlos y Diego me tomaron de los brazos y no me dejaron.

- No te podés mover, Luna, quédate quieta.- Me dijo Adriana.

Giré la cabeza a la mesa del comedor y allí estaba Fabiana junto a Miguel y Ricardo.

- Eso te pasa por falopearte, ¿viste?- Habló Fabiana.- Por drogadicta. Ahora jodete, no sé ni porqué te ayudan.

- Fabiana, no digas eso, por favor.- Pidió la Chila.- No ahora.

Ella miró a su hermana con una expresión de disgusto y rodó los ojos.

- ¿Qué te pasó?- Preguntó Ricardo.

- Me dispararon.- Le respondí simple.

Me miró algo asustado. - ¿De verdad?

Asentí. - ¿Martina está bien?- Pregunté preocupada.

- ¿Martina?, ¿qué Martina?-Dijo sin saber Segundo.

- La China.- Expliqué con su apodo.

- Ah, esa. Se murió- Dijo negando con la cabeza -, no aguanto y, bueno... la quedó.- Se me rompió el corazón.

Unas lágrimas recorrieron mis cachetes. - No llores por ella. Era una hija de mil puta.- Me dijo Carlos.

- Carlos, no hables así. Y déjala que llore, era su mejor amiga aunque lo queríamos.- Lo retó Adriana.

Iba a hablar, pero un par de toques en la puerta me interrumpieron.

Uno de los hermanitos chiquitos de Carlos amagó a abrir, pero Segundo lo cagó a pedos y abrió él.

Sonrió al abrir la puerta, chasqueó la lengua y habló.- Pibe.

Dejó que entrara y verlo hizo que un nudo se formara en mi estómago y poco después otro en la garganta.

- Uh, estás hecha mierda...- Murmuró casi inaudiblemente al verme.

Y si no quedó claro quién es, es Danilo.

- Pensé que estabas ocupado.- Musité.

- ¿Ocupado?, ¿en qué?- Soltó una carcajada. Algo que no sabía él pero que a la vez sí sabía, era que yo me enteraba de todo. Lo sabía porque me conocía, pero no sabía porque creía que yo de él, no estaba enterada de nada.

- Con Pía.- Me encogí de hombros y la sonrisa se le borró. Era un silencio que para todos seguro era incómodo, pero para mí no lo era.- No la podés dejar un rato porque ya se te arma bardo, gobernado. Pero no te culpo, yo estaría igual si fuera con alguno de los amigos de Carlos.

Carlos soltó una risa nasal y se tapó la cara. Él sabía de que hablaba, o mejor dicho, de quién hablaba. Fernando Cisneros.

- Eh... Luna, ¿cómo sabes qué estoy con Pía?

- Flaco, ¿vos te pensás que nadie sabe?- - Lo sabe hasta Mariela. Pía fue a contarle a cada mina y a cada chabón que está con vos. "Ay, que me hice novia de Danilo", "que Danilo es el mejor novio". Todo el día jodiendo con eso. Parece que con ella sos maravilloso, porque cuando quisimos tener algo serio, lo cagaste a la semana. ¿Será el crecimiento?

- Luna, o sea, yo no sabía que ella había dicho que somos novios...

En el momento me reía, pero también pensaba "¿No dí suficiente?"