MARIANA Amor Y Poder 2.0

Capitulo 14: Aún lo amo

No tenía nada que hacer que decidí ir a leer y al pasar por la alberca me senté en un camastro y comencé a leer.

— No se que esperas para irte de aquí niña — Penélope me gritó cuando me vio en la alberca mientras leía. No le preste importancia y preferí retirarme de ahí. — Si crees que a Damián le importo ese beso estás muy equivocada — sabía que Penélope no dejaría pasar ese incidente — A Damián no le importas, solo fuiste una caridad — Penélope me detuvo de mi brazo.

— Déjame ir — dije en voz suplicante.

— Eres una mustia, se que te encanta provocar a mi hombre pero tampoco quieres nada con el y ese jueguito ya le canso a Damián y por eso me trajo a esta casa por qué soy más mujer que tú —

Solo baje mi mirada, no quería discutir con Penélope, tal vez ella tenía razón. Intenté soltarme de su agarré pero Penélope me dio una fuerte bofetada, aún así no hice intento de pelear solo cerré fuertemente mis ojos.

— ¿Que sucede aquí? — Damián iba llegando.

— Marianae intento golpear y la detuve — como siempre Penélope haciéndose la víctima.

— Mariana disculpate — dijo Damián con voz firme.

— Discúlpeme señora Penélope — me disculpé sin levantar mi visita y salí de ahí lo más rápido.

Subí a mi habitación y me encerré de nuevo. Estaba acostado en la cama con la mirada perdida, sentía que me estaba marchitando en ese encierro, todo estaba pasando tan rápido que me sentía abstracta de la realidad.

— Bo... Mariana ¿Estás bien? — Damián entro a mi habitación sin darme cuenta.

Lo mire y le di una sonrisa de lado para después soltar un gran suspiro — Si — dije sin ánimos.

— ¿Que te sucede? Últimamente te he notado distraída —

— Nada, estoy bien — volví a repetir.

—  ¿Como esta tu tobillo? Necesito que estés al cien para que regreses a tus prácticas —

— Oh, estoy mejor aún que aún necesito el bastón. De las prácticas ya no quiero volver a ellas —

Damián no dijo nada y solo me observaba — Mañana salgo para el norte a cerrar unos negocios, cuando regrese hablamos de el divorcio —

Lo mire con los ojos muy abiertos — ¿Estas hablando en serio? — fue lo único que pude preguntar.

— Si bonita — no dijo nada más y salió de mi habitación.

Estaba tan feliz porque sería libre <<Si crees que a Damián le importo ese beso estás muy equivocada. A Damián no le importas, solo fuiste una caridad>> recordé las palabras de Penélope y las lágrimas salieron de mis ojos, ella tiene razón no le importo a Damián.

Con Damián me había dicho, el salió de viajé.
Estaba parada en las escaleras ví como el se despedía de Penélope con amor, yo solo solté un suspiro, entendí que Damián había dejado de amarme.
Apenas Damián salió Penélope junto con Laura le pidieron a Leo que las llevará a la Gran Ciudad.
Creí muy tontamente que yo también podía salir pero en la caseta de seguridad me lo impidieron así que regrese a la casa.

Estaba dormida cuando sentí un fuerte golpe que me hizo despertar.

— Lárgate de aquí maldita zorra — era Penélope se oía que estaba ebria — No oíste lárgate —

— Sal de mi habitación — dije muy asustada.

— Yo no te quiero aquí y no Damián te quiere aquí — decía arrastrando las palabras.