𝑫𝑹𝑬𝑨𝑴𝑺 𝑶𝑵 𝑻𝑯𝑬 𝑻𝑹𝑨𝑪𝑲 | 𝑙𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑛𝑜𝑟𝑟𝑖𝑠

𝑰: 𝘵𝘰𝘯𝘦𝘭𝘭𝘪′𝘴 𝘳𝘦𝘴𝘵𝘢𝘶𝘳𝘢𝘯𝘵

☆ El restaurante Tonelli ☆

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𝑨𝒍𝒊𝒔𝒐𝒏

Todas la mañanas tenía la misma rutina, me levantaba, me preparaba, cogía mis cosas e iba al restaurante de mis padres a trabajar mientras estudiaba entre descansos. Así era todas las semanas menos los findes que me los daban libres y podía salir con mis amigas.

Estudiaba online así que mis estudios nunca fueron un problema para mi, era muy buena estudiando y se me quedaban las cosas rápido, por eso la mayor parte del tiempo mis padres me ponían de camarera. Pero no por falta de personal, si no porque según ellos ese restaurante iba en el legado de la familia.

Era hija única pero tenía muchos primos y varios de ellos trabajan conmigo en el restaurante al igual que mis tíos, en fin el legado. Mis abuelos ya eran algo mayores pero ellos seguían encargándose de algo que le daba la vida al restaurante, el gran invernadero.

Ese lugar era lo único que nunca me aburría del restaurante. Había una gran variedad de plantas, flores y fauna allí, era mágico mejor dicho. Siempre que podía me escapaba allí con ellos hasta por la noche, donde se podían apreciar las estrellas perfectamente gracias a que todas sus paredes eran de cristal.

─── Mundo llamando a Liss, mundo llamando a Liss. ─── a mi lado izquierdo apareció mi primo, Francy, burlándose de mi haciendo como si hablara con una emisora.

─── ¿Necesitas algo? ─── le dije con una ceja alzada.

─── Si, que atiendas las llamadas para las reservas. ─── señalo el teléfono que sonaba constantemente. 

Suspire ─── Enseguida.

Levante el teléfono y cogí un bolígrafo para empezar a apuntar en la agenda de reservas.

─── Buenos días, ¿desea algo? ─── intente hablar con un tono amable y entusiasmado.

─── Buenas, queria hacer una reserva para mañana por la noche. ─── hablo unas voz gruesa y con acento británico.

─── Claro, ¿para cuantas personas?

─── Para unas 8 personas, ¿estaría bien? ─── me pregunto.

─── Si esta bien su reserva está hecha, ¿alguna otra cosa?

─── Oh claro me preguntaba si podía ser una mesa apartada de las ventanas. ─── sonaba dudoso. ─── Es que preferimos comer sin la prensa y los fanáticos.

Rei ligeramente de una forma amable ─── Lo entiendo, hay una sala preparada para esas cosas, ¿estaría bien?

─── Oh si claro, estaría perfecto muchas gracias. ─── sonaba más calmado y aliviado.

─── ¿A que nombre puedo poner la reserva? ─── pregunte como habitualmente.

─── Lewis, Lewis Hamilton ─── asentí con el teléfono entre el hombro y la oreja mientras escribía.

─── Perfecto. Todo listo.

─── Muchas gracias. ─── sin más me colgó. 

Deje el teléfono en su lugar y volví a la barra donde se encontraba mi primo atendiendo. 

─── ¿Ya? ─── asentí y él me sonrió ─── Perfecto, ya puedes volver a tu mundo Liss.

Le pegue en el hombro divertida y salí de la barra para abrir la puerta del invernadero y meterme. Habían varias personas dentro de él que comían y luego daban un paseo por aquí.

 ─── Abuela ─── camine hasta ella que estaba agachada con unos guantes llenos de tierra y giró su cabeza. ─── ¿Necesitas ayuda?

Ella me mostro una sonrisa tierna y palmeo su lado para que me sentara. ─── Claro que sí cielo, ven. 

─── ¿Que estás plantando? ─── le pregunte mientras me ponía unos guantes.

─── Mejor dicho que vas a plantar tú ─── me tenio la pala pequeña y la semilla, rei y la tome. ─── Yo ya estoy mayor para estar agachada. ─── puse los ojos en blanco

─── Abuela vas a cumplir 68, no eres tan mayor. ───le dije abriendo el agujero en la tierra.

─── Dicelo a mi columna. 

─── ¿Que flor es? ─── le pregunte metiendo la semilla en el agujero y echándole tierra encima.

─── Un tulipán ─── me contestó mirándome.

─── ¿Y porque un tulipán? ─── le pregunté señalándole todos los tulipanes que ya teníamos. 

─── Simbolizan el enamoramiento y la pasión del amor. Además me gusta que al menos una vez alguien plante uno para que encuentre a su amor verdadero.  ─── me contestó jugando con su anillo de casada. ─── Y me ha funcionado.

─── Abuela esas cosas son chorradas, que plantes un tulipán no quiere decir que vaya a encontrar el amor verdadero. 

─── Tu abuelo y yo nos conocimos luego de que mi madre me hiciera plantar un tulipán-

La interrumpi. ─── Y luego tu padre te trajo aquí donde el abuelo trabajaba junto a su familia y os enamorasteis de amor a primera vista. ─── termine la famosa historia de ambos.

─── Así es.

Amaba a mi abuela pero me era difícil creer en que por plantar un tulipán iba a encontrar al amor de mi vida. No recuerdo que mis padres se conocieran luego de plantar un tulipán, ni mis tíos, ni algunos de mis primos con sus parejas.

─── No recuerdo que nadie más de la familia lo haga hecho y haya encontrado a su amor verdadero. ─── le dije regando la semilla recién plantada.

─── Lo se, pero con ellos no me ha hecho falta para que encontraran a su amor verdadero. ─── me lleve una mano al pecho fingiendo estar ofendida. ─── No me mires asi, tienes 22 años y aún no tienes novio, más bien, nunca has tenido novio.

Me habló mientras recogíamos las cosas.

─── Eso no es cierto, estuve con Matteo. ───me miró con una cara seria.

─── A nadie le caía bien Matteo, era un tonto y además no estuvisteis más de 4 meses.

─── ¿Eres mi abuela o mi hater? ─── le pregunté riendo.

─── Solo quiero que seas feliz vita mia. ─── me llamo vida mía, el apodo que siempre usaba cuando era niña, cada nieto tenia uno diferente y vita mia era el mío.

─── No necesito un hombre para ser feliz ─── le dije y ella me acarició la mejilla.

─── Lo se con certeza pero a veces necesitamos sentir que estamos enamoradas y tener esa chispa que nos hace levantarnos con las mejillas sonrojadas y deseando verlo. ─── me sonrió tiernamente y yo la mira a los ojos.

Pues esperemos que el tulipán haga efecto rápido abuela, pensé.

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