- El diablo ha llegado a América... Calabozos y dragones, al principio considerado un juego inofensivo, ahora preocupa tanto a padres como a psicólogos. Estudios relacionan el comportamiento violento con el juego y sostienen que promueve el satanismo, el sacrificio ritual, la sodomía, suicidio e incluso...¡Asesinato!- concluyo el artículo Eddie, logrando que quienes lo rodeaban en aquella extensa mesa de la cafetería de Hawkins High, su grupo más cercano de amigos, lanzara un par de risotadas.
A un par de mesas de distancia, Mina ingresó a la cafetería respaldada por Carol, Tommy y Sienna, el pequeño circulo que había rescatado del grupo que solía ser el de sus amigos cercanos y los de Billy, que eran básicamente los integrantes del equipo de basquetbol y sus respectivas novias de turno. Si bien mantenían las formalidades y aún le daban sonrisas condescendientes por la muerte de su hermano, Mina no los soportaba y estaba segura de que ellos tampoco la soportaban.
- Esto esta malditamente lleno.- susurró Sienna, bufando mientras escaneaba el lugar con una mueca de disgusto como acostumbraba a hacer cada vez que entraba a algún sitio con más de diez personas.- Comamos afuera...
- Tommy es alérgico al noventa por ciento de las cosas que están afuera, como si tuviéramos opción.- lo delató Carol, la novia del mencionado, quién frunció el ceño sonrojado frente al comentario de su novia.
- Gracias por siempre contar mis privacidades, amor. En serio, gracias.
Mina y Sienna se rieron ante la rutinaria escena de los enamorados, acostumbradas a que estos pelearan o se molestaran mutuamente.
- ¡Hey, Tommy!
Mina y sus amigas se giraron hacia donde provenía el saludo, mientras el único hombre del grupo las abandonaba para correr hacia la mesa de Jason Carver como un perro faldero, respondiendo a su llamado como si fueran manada. Carol siguió a su novio contenta porque, quizá, si simulaban que los deportistas les caían bien, podrían encontrar sitio y no tendrían que comer afuera. Sienna y Mina intercambiaron miradas de arrepentimiento, ya que de los cuatro, a quienes más repudiaban los del equipo de básquet eran a ellas.
De todo el grupo, Mina solamente podía llamar con total seguridad "amiga" a Sienna Serrano, y estaba segura de que funcionaba de la misma forma para la muchacha. Carol y Tommy podían ser buenas personas detrás de toda esa faceta de matones, pero tenían sus actitudes altaneras y egoístas que solían a menudo repugnar a la pelirroja. Sienna era como un cachorro, buena, afable y bonita, tímida e introvertida, cosa que la mayoría de la gente veía como una vía fácil para aprovecharse de ella. Con Minerva como amiga, sin embargo, la gente se lo pensaría dos veces si no quería que la pelirroja los hiciera pedazos en su defensa.
- Comemos y ya.- la consoló la azabache, escaneando a su amiga pelirroja con aquellos ojos grises que volvían loca a media escuela.
Mina se había vuelto extremadamente cercana a Sienna cuando Billy decidió que una semana había sido suficiente para estar con la azabache, desechándola por una rubia del equipo de porristas. Primero, la pelirroja había decidido pasar tiempo con ella por compromiso, intentando reparar los errores de su hermano. Al pasar más y más tiempo juntas, ambas se dieron cuenta de que tenían mucho en común y Billy se había tenido que morder la lengua al ver a Sienna comenzar a formar parte de su grupo de amigos.
- Comemos y ya.- repitió la pelirroja pasando un brazo por los hombros de su amiga, aproximándose a la extensa mesa de deportistas y porristas mientras Jason le ponía aquella mirada lastimera y amiga del pueblo que Mina tanto odiaba.
El rubio abrió los brazos esperando un abrazo de la muchacha, frunciendo las cejas en claro signo de que estaba angustiado por Mina aunque la pelirroja estaba segura de que era todo parte de una actuación para que los demás estudiantes lo vieran abrazar a la pobre hermana inseparable del difunto Hargrove.
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"Now That You Are Free" // Eddie Munson.
FanfictionEddie Munson nunca fue el chico más afortunado, pero había algo en Minerva Mayfield que lo hacía sentir diferente. Mina solía ser el alma de la secundaria, divertida, radiante, siempre rodeada de amigos y cautivando a cualquiera con su personalidad...