stargirl | gojo satoru

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— ¿Es en serio?

— Taue...

— Estás loca si crees que haré eso.

La representante de la actriz cerró los ojos mientras fruncía su boca, sabía perfectamente la respuesta que iba a recibir de la joven pero aún así decidió ir a preguntar a ciegas, obteniendo un rotundo no.

— Ya no es decisión tuya... La agencia ya...

— Pues la agencia debería de pasarse esa propuesta por...

— ¡Aeri!

La nombrada finalmente vio a su representante con ojos de apatía, estaba segura de su respuesta, no iba a hacer aquello que la agencia planeaba por sus méritos propios o secretos, sabía que había muchas cosas de por medio pero esa petición la sacaba un poco de sus cabales.

— Solo serán unos cuantos meses...

— ¡¿MESES?! — la cara de la pelirroja se desfiguró al escuchar a la contraria — No voy a aceptarlo Junko, fin de la conversación.

Aeri tocó su rostro tratando de aplacar sus emociones, le parecía erróneo que la colocaran en esa posición de aceptar una relación falsa. Era cierto que eso estaba acostumbrado en la farándula, pero en toda su carrera nunca pensó que eso le pasaría a ella, siempre soñó con enamorarse a primera vista y hacer pública su relación. Y había una y mil razones por las cuales se negaría, entre ellas, que estaba en la cúspide de su carrera, recibiendo guiones para dramas y tenía el presentimiento que el tener una pareja lo deterioraría por completo.

Junko iba a abrir su boca para tratar de persuadir a Aeri, pero no pudo volver a hablar ya que la puerta del camerino se golpeó abruptamente, dejando ver una figura adulta que para los ojos de la actriz, aquella presencia le hacía saber que ya no tenía opciones.

— ¿Qué diablos haces?... no te eduqué para que tu voz se escuchara hasta los pasillos.

Taue Sakura se hizo presente en el lugar; mamá y dueña de la agencia que representaba a Aeri.

'No había opción'

— Déjanos a solas Junko.

— Ella no se irá — la pelirroja observó a su madre de forma retadora cuando intentó correr a la pelinegra — Es mi representante, así que tiene que estar en todos los lados en donde yo esté.

— ¿Tienes que ser tan grosera?

Aeri ignoró la pregunta de su madre y llevó su atención hacia el guion que debía aprender, estaba en ese lugar para hacer un patrocinio sobre una marca de maquillaje, pero debía guardar en su memoria algunas frases debido a que su voz se iba a escuchar en este comercial. Una carpeta llena de papeles fue tirada con fuerza en su regazo, impidiendo que siguiera leyendo el guion y haciendo que mirara nuevamente su progenitora.

— Déjam..

— Tu contrato dice que puedo hacer lo que yo desee con tu carrera — la adulta interrumpió a la joven colocando sus manos en los brazos de la silla impidiendo su huida — Ya firme el contrato con la agencia para que mantengas una relación, solo serán unos meses y serás libre.

Aeri parpadeó algunas veces intentando analizar la información, giró su cabeza observando a Junko y esta solo mantenía su mirada en sus pies mientras movía sus manos con algo de nerviosismo.

'Junko... ¿así que a esto te referías con que ya no tenía opción?'

— Pon por primera vez tus pies sobre la tierra.

Sakura volvió a retomar su postura recta y abandonó el camerino dejando solas nuevamente a las dos mujeres. Aeri llevó sus manos hacia sus rodillas y trató de calmar aquel ataque de pánico que presentía, no tuvo tanto tiempo de pensar en eso ya que sus manos fueron tomadas por la pelinegra, haciendo que la mirara.

— Perdóname Aeri — Junko se aferraba a las manos de la actriz y trataba de no culparse, pero era imposible — Tú madre no me dio opción de defenderte porque ya había firmado el contrato antes de decirme... yo...

— No es tu culpa — la representante miró a la contraria y esta solo se dignó en sonreír tratando de armonizar la situación — No es la primera vez que lidió con mi madre... podré esta vez.

'¿Podré?'

Una voz fuera del camerino hizo que Junko saliera del lugar ya que estaba siendo requerida para los últimos detalles. Aeri al estar sola en esa habitación no pudo evitar soltar su enojo y aventó con fuerza los papeles que su progenitora le había dado por algún rincón del camerino, sabía que su madre podría traer entre manos cualquier cosa, menos el que la obligara a estar en una relación.

Tal vez no era lo peor para las personas de afuera, pero para los actores era algo muy delicado. El entrar en una relación no te hacía saber si terminaría bien o mal para tu carrera, al final del día era una moneda al aire.

— Una relación... ja — la actriz comenzó a reírse al pensar en eso — Y luego con él...

La pelirroja mordió su labio inferior pensando acerca de la situación y la curiosidad terminó ganándole. Fue sobre su teléfono con velocidad y abrió el navegador, sus dedos teclearon aquel nombre y de inmediato los resultados se arrojaron en la pantalla.

Gojo Satoru.