FARSO AMOR || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR Y NICK GALITZINE ||

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TAYLOR

La semana no había comenzado como yo esperaba. El trabajo estaba siendo una mierda. Y una de las grandes. No dejaban de venirme casos importantes que resolver. Porque sí, era abogado, y no era por ser presumido, pero era uno de los mejores en todo el bufete y el que con mayor éxito, los había resuelto. Y en otras circunstancias, todos los papeles con todos los casos que tenía encima de mi escritorio, los hubiera resuelto con éxito si no fuera por mi humor de mierda.

¿El motivo?

Mi pareja. O más bien ahora, mi ex novio. Me había dejado sin darme una explicación coherente después de dos años de relación. Todo se esfumó de la noche a la mañana. Me había dejado solo. En una casa solo y con la cabeza en otro lado. Me había jodido la vida. Más bien me la había cambiado. Dejándome roto y tirado por el suelo. Sin una explicación y con una simple frase.

"Taylor, lo siento pero lo nuestro ya no es lo mismo que antes. He dejado de quererte"

Una frase que me rompió en mil pedazos.

Otro motivo y el más importante. Casi veinte llamadas perdidas de mi madre. Y otros tantos mensajes. No me había atrevido a contarle que me habian dejado. O es que simplemente, cuando intentaba llamarle y contarle todo, se me quebraba la voz y era incapaz de confesarle que después de dos años, me habían abandonado.

Un punto a mi favor era que, mi familia nunca llegó a conocer a Chris. Vivíamos en países diferentes y por circunstancias del destino, nunca llegaron a conocerlo. Y lo agradecía infinito. Que no lo hubieran conocido y que pensaran que era una simple relación, me ayudaba bastante.

Mi teléfono comienza a sonar. El nombre de mamá aparece de nuevo en la pantalla. Y éste era el momento. Debía de decirle todo lo que había ocurrido en mi vida esta última semana. Pero cuando voy a pulsar el botón de descolgar, la puerta de mi oficina se abre y aparece la persona que menos quería ver en este momento.

Mi compañero de trabajo; Nicholas Galitzine. La persona a la que más detestaba del mundo desde el primer día en el que me la crucé. No lo soportaba, y mucho menos soportaba ver su sonrisa de insuficiencia en su estúpido rostro en este momento.

- Vete - le señalo la puerta - tengo una llamada importante.

- Esto también es importante.

Me ignora. Como hacía siempre. Camina por la oficina y acaba sentándose en una de las sillas frente al escritorio.

- Responde la llamada. Aquí te espero.

El muy capullo me sigue ignorando. Abre una carpeta que había traído con él y comienza a leerla. Como si yo no estuviera frente a el pidiéndole que se marchara.

No me queda de otra que descolgar la llamada cuando mi madre vuelve a insistir. Aflojo el nudo de mi corbata y me preparo para la avalancha de preguntas.

- ¿Te acuerdas de que tienes madre?

- Hola, mamá.

- Llevo intentando contactar contigo desde hace dos días, Taylor.

Mi madre grita desde la otra línea. Nick lo está escuchando todo, porque no tarda en quitar la vista de los papeles y poner toda su atención en mi.