Tal vez en otra vida...

Cap 4 | Secretos y mentiras

| Continuacion...

✧༺☤༻✧

Alastor desaparecio desde su sombra, apareciendo en otra parte del hotel. En la planta alta, caminando por los pasillos; su mente ocupada en los planes que tenía para Lucifer, el rey y soberano del infierno. Seguia pensando en lo que sucedio la noche anterior, en lo que hizo. No podía creer que hubiera tenido que ayudarlo en su momento de debilidad, pero sabía que era necesario para sus propios fines.

Mientras tanto, Lucifer estaba en su habitación, intentando procesar lo que había pasado. No podía creer que Alastor lo hubiera ayudado, y menos aún que se hubiera mostrado tan... amable. Pero claro, el sabe que solamente esta jugando con el, así que no se deja engañar tan fácilmente. Trata de no pensar mucho en eso, ya que solamente se estresaba mas, y odiaba eso- ya que el lidiar con su estres era demasiado cansado. Para cualquier probablemente, pero a Lucifer realmente le molestaba estresarse. -Maldita sea... Porque me importa tanto eso? No puedo dejar de pensar en lo sucedido... Es... Estupido sabiendo que ese venado solamente esta jugando conmigo-

De pronto, Charlie toco la puerta de la habitación, preocupada por su padre. Lucifer al escuchar el sonido de la puerta, rápidamente se recompone, tratando de parecer normal; dejando pasar a su hija a la habitación. Charlie una vez dentro, se acerca a su padre preocupada -Papa, ¿estás bien? Has estado actuando de manera extraña desde que... desde hace unos días... Y eh notado que tu y Alastor ya ni siquiera se dirigen la palabra...-

Lucifer suspiró, intentando sonreír -Estoy bien, Charlie. No pasa nada conmigo y ese venado, simplemente... El se toma su espacio y yo el mio, es todo, nada de que preocuparse, cariño.-

Pero Charlie no se dejó engañar. Sabía que algo estaba pasando, y decidió investigar un poco más por si sola, así que simplemente no insistió -Esta bien... Si tu lo dices, confiare en ti- Dijo Charlie con una sonrisa y luego se acerco a el a abrazarlo. Lucifer se sorprendió, pero sonrió levemente y correspondió al abrazo.

Después de unos segundos, Charlie se despide de su padre para seguir atendiendo el hotel y sale de la habitación, sin mas.

Mientras tanto, Alastor estaba en su habitación, mirando desde la ventana de su habitación, a la de Lucifer. Al estar de lado a lado, era fácil, mientras que el no se percate, claro. Sonreía para sí mismo, pensando en los planes que tenía para el rey del infierno.

-Pronto- se dijo a sí mismo, Alastor -Pronto, Lucifer, sabras lo que tango planeado para ti...-

Los días pasan, y Alastor sigue sin acercarse a Lucifer, pero Lucifer decidió ya no insistir mas, ya que, ¿Para que lo hace? No es como que le importe que Alastor lo ignore o algo así, ¿Cierto? Bueno, pues... No, de echo, si le molesta, ya que desde aquel día le entro la curiosidad por preguntarle a Alastor porque lo ayudó, pero simplemente no consigue respuesta alguna que lo convenza, todos son un, "no pasa nada", "no se de que habla", "¿Porque le importaría?", "¿No es de su incumbencia". Respuestas como esas no le sirven a Lucifer, pero en fin, si Alastor no le habla a Lucifer, el tampoco le hablara a Alastor. Así de fácil.

Un día, como cualquier otro en el hazbin hotel, Lucifer se encontraba caminando por los pasillos del hotel con tranquilidad, hasta que miro la puerta de la habitación de Alastor abierta. En ese momento, vio la mejor oportunidad para ver que escondía ese venado, así que, sin pensarlo dos veces, entro en ella. Miro al rededor, asegurándose de que no estuviera el demonio de la radio dentro, y efectivamente, no estaba -Valla... Al final este idiota no tiene malos gustos...- Dijo el rubio mientras ve al rededor. Se adentro mas y mas, mirando que tenia las paredes llenas de cabezas de venados en ellas -Ew... Que... Asqueroso...-.

Trato de no prestarle mucha importancia a ello, a lo que siguió caminando en la habitación, no sabe que buscaba, pero estaba seguro de que encontraría algo para exponerlo después. No paso mucho, cuando mientras caminaba, de repente, Lucifer escucha una voz detras de el -Es de muy mala educación entrar a husmear en las habitaciones de los demas... ¿No cree, su majestad~?- Era Alastor, quién había aparecido desde su sombra detras del rey. Lucifer se sobresalto un poco al escucharlo, que dio un salto hacia atras.