La llegada de yeonjun

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22 de enero de 2002: La llegada de Yeonjun

Era una fría mañana de enero en Seúl. El cielo estaba cubierto de nubes grises, y la nieve caía suavemente sobre la ciudad. La temperatura era helada, y las calles estaban desiertas, excepto por el tráfico ocasional de vehículos y algunos transeúntes apresurados. En un pequeño pero acogedor apartamento en el centro de la ciudad, un joven de 17 años estaba preparándose para un día aparentemente normal. Este joven era Jay, que vivía solo desde hacía varios meses, sumido en sus estudios y en sus propios pensamientos.

Jay había estado viviendo solo desde que su madre, Taehyun, y su hermano menor, Yeonjun, se mudaron temporalmente a Estados Unidos. El plan de su madre era claro: casarse con un rico empresario estadounidense que podría ofrecerles una vida más acomodada. Jay, aunque no del todo satisfecho con la situación, había aceptado el cambio con la esperanza de que, eventualmente, todo saldría bien. Sin embargo, no esperaba que aquel día en particular trajera consigo una sorpresa inesperada.

La madre de Jay, Taehyun, había regresado a Corea del Sur para resolver algunos asuntos pendientes antes de su matrimonio en Estados Unidos. Ella estaba decidida a cumplir con el plan que tenía en mente: asegurar que Jay se casara con una joven de Estados Unidos para que pudiera integrarse completamente a la cultura americana y dejar atrás sus raíces coreanas. Taehyun tenía grandes expectativas para la vida de Jay y pensaba que este matrimonio sería una oportunidad para él de establecerse en una nueva vida.

A primera hora de la mañana, Jay estaba en la cocina preparando un desayuno simple cuando escuchó el timbre de la puerta. Abrió la puerta y allí estaba su madre, Taehyun, con una expresión grave y preocupada. Ella llevaba consigo una pequeña maleta y una expresión de tristeza en sus ojos. Pero lo que llamó la atención de Jay fue la presencia de un pequeño niño que estaba al lado de su madre. Era Yeonjun, su hermano menor, que tenía solo seis años en ese momento.

"Jay," dijo Taehyun con una voz temblorosa, "quiero que conozcas a tu hermano Yeonjun. Vamos a dejarlo contigo por un tiempo."

Jay se quedó sorprendido. "¿Dejarlo conmigo? ¿Por cuánto tiempo?"

Taehyun suspiró, "Vamos a Estados Unidos para finalizar los preparativos para tu matrimonio. No sabemos exactamente cuánto tiempo tomará, pero será por un tiempo indefinido. Espero que puedas cuidar de él mientras estamos fuera."

Jay miró a Yeonjun, que estaba sujetando la mano de su madre y observando a Jay con grandes ojos curiosos. El niño parecía nervioso y asustado por la situación. Jay se agachó y le sonrió, tratando de tranquilizarlo.

"Hola, Yeonjun," dijo Jay con amabilidad. "No te preocupes, estarás a salvo aquí conmigo."

Taehyun besó la frente de Yeonjun y luego se dirigió a Jay con una expresión de preocupación. "No olvides que tenemos grandes planes para ti, Jay. Este matrimonio en Estados Unidos es muy importante para nuestro futuro."

Jay asintió, aunque una parte de él estaba inquieta por la situación. Se despidió de su madre con un abrazo y una promesa de cuidar de Yeonjun. Taehyun y Yeonjun se despidieron con un abrazo breve, y Taehyun se fue hacia el aeropuerto, dejando a Jay y Yeonjun en el apartamento.

Durante los días siguientes, Jay se adaptó a su nueva rutina como cuidador de su hermano menor. Aunque no estaba completamente preparado para asumir esta responsabilidad, hizo todo lo posible para que Yeonjun se sintiera lo más cómodo posible en su nuevo entorno. A pesar de las dificultades iniciales, ambos hermanos comenzaron a desarrollar un vínculo especial, lleno de cariño y comprensión mutua.

22 de enero de 2024: El presente

El reloj marcaba las ocho de la mañana del 22 de enero de 2024. El apartamento de Jay seguía siendo un lugar acogedor, pero había cambiado significativamente a lo largo de los años. Ahora tenía un ambiente más moderno y elegante, reflejando el éxito y la madurez de Jay. Sin embargo, una cosa que no había cambiado era la presencia constante de Yeonjun a su lado.

En el presente, Yeonjun tenía 25 años y Jay 24 años. Ambos seguían viviendo juntos, aunque la dinámica entre ellos había cambiado. Taehyun, que ahora tenía 22 años, vivía con su prometido Jungwon en una casa cercana. La vida de Yeonjun y Jay había evolucionado, pero algunos problemas persistían, especialmente en lo que respecta a sus sentimientos y relaciones personales.

Yeonjun había desarrollado una actitud celosa y posesiva hacia Jay. Su amor por su hermano mayor había crecido a lo largo de los años, y ahora no podía soportar la idea de que Jay estuviera con alguien más. Cada vez que Jay traía a una pareja a casa, Yeonjun mostraba su descontento de manera evidente, lo que a menudo creaba tensiones en la relación.

Un día, Jay llegó a casa con su nueva pareja, una joven llamada Sohee. Ella estaba emocionada por conocer a Yeonjun, pero pronto notó la atmósfera tensa que se había creado. Yeonjun, con una actitud fría y distante, se mantuvo en silencio durante la cena. Jay trató de mediar en la situación, pero la incomodidad era palpable.

"¿Todo está bien, Yeonjun?" preguntó Jay, tratando de romper el hielo.

Yeonjun levantó la mirada y sonrió forzadamente. "Sí, todo está bien."

Sohee notó la falta de entusiasmo en la voz de Yeonjun y se dirigió a Jay en privado. "Jay, ¿estás seguro de que todo está bien con tu hermano? Parecía un poco incómodo."

Jay suspiró y asintió. "Sí, lo sé. Yeonjun puede ser un poco reservado a veces. Estoy tratando de ayudarlo a adaptarse a las nuevas situaciones."

A medida que la relación de Jay con Sohee avanzaba, Yeonjun se volvió cada vez más posesivo. Jay notó que cada vez que pasaba tiempo con Sohee, Yeonjun se mantenía alejado o encontraba excusas para interrumpir. Jay decidió hablar con Sohee sobre la situación.

"Sohee," dijo Jay con una expresión seria, "quiero que sepas que Yeonjun es muy importante para mí. A veces puede ser un poco difícil, pero estoy haciendo lo posible para que todo funcione."

Sohee asintió con comprensión. "Lo entiendo, Jay. Es solo que me preocupa que Yeonjun no esté tan abierto con nosotros."

Jay le dio una sonrisa triste. "Te agradezco por tu paciencia. La verdad es que Yeonjun ha pasado por muchas cosas y a veces es difícil para él aceptar cambios."

La situación se volvió aún más complicada cuando Taehyun regresó a Corea del Sur con Jungwon. Yeonjun, al ver a su madre nuevamente, se sintió aliviado, pero también resentido por el hecho de que su vida había cambiado tanto. Taehyun se dio cuenta de la dificultad de la situación y trató de hacer las paces con su hijo menor.

"Yeonjun," dijo Taehyun con voz suave, "sé que ha sido difícil para ti. Pero quiero que sepas que siempre he tenido buenas intenciones."

Yeonjun miró a su madre con una mezcla de tristeza y enojo. "Mamá, ¿por qué no nos dijiste la verdad desde el principio? ¿Por qué tuviste que dejarnos y arrastrarnos en esta situación?"

Sohee se acercó y le tomó las manos a Yeonjun. "Lo siento, hijo. No fue mi intención causarte dolor. Solo quería lo mejor para ti y para Jay. A veces, las decisiones difíciles son las que más duelen."

Jay observó la conversación con una sensación de culpa y preocupación. Se dio cuenta de que había estado tratando de equilibrar sus propias emociones con las necesidades de su hermano, pero a menudo se sentía atrapado entre dos mundos.

Al final del día, Jay se sentó con Yeonjun en la sala, tratando de resolver las tensiones que habían surgido. "Yeonjun," dijo Jay con voz tranquila, "quiero que sepas que eres muy importante para mí. No importa quién esté en mi vida, siempre te consideraré una parte esencial de ella."

Yeonjun lo miró con ojos brillantes y asintió lentamente. "Lo sé, Jay. Solo me asusta la idea de perderte."

Jay le dio un abrazo a su hermano menor, tratando de transmitirle todo el amor y la seguridad que sentía por él. "Nunca te voy a dejar, Yeonjun. Siempre estaré aquí para ti."

A medida que el año avanzaba, Jay y Yeonjun continuaron enfrentando los desafíos de la vida juntos. Aunque las relaciones y las dinámicas familiares seguían evolucionando, el vínculo entre los hermanos se mantuvo fuerte. La vida estaba llena de altibajos, pero el amor y la lealtad que compartían les ayudaban a superar cualquier obstáculo que encontraran en su camino.

Hermano posesivo y celoso - jay x yeonjunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora