Cinco amigos míos y yo en dxd como los 12 caballeros dorados del zodiaco.
Los Caballeros de Athena, sin un patriarca ni la propia Athena en tiempos donde ni hay guerra, ¿qué es lo que hará?
high school DxD ni Saint Seiya me pertenecen, los derechos...
En la ciudad de Kuoh, una ciudad como cualquier otra donde la gente salía a hacer sus compras o trabajar mientras los jóvenes iban a estudiar, lo normal en una ciudad normal, o durante el día, ya que por la noche, era una historia muy diferente.
Al ocultarse el sol y levantarse la Luna en el cielo, mientras todos dormían o se encontraban en sus casas, era cuando el mundo iluminado por la luna actuaba.
La realidad es que en este mundo, no solo hay personas, en este mundo existen más criaturas y de todos tipo, Demonios, Ángeles Caídos y Ángeles, entre más seres de otras mitologías. Pero centrándonos a la ciudad en la que nos encontramos, ocultos entre las sombras demonios llegaban a acechar a las desafortunadas personas que cayeran en sus lugares de caza.
...
En un almacén fuera de uso, se podía ver a un hombre y una mujer entrando al almacén a pesar del letrero que decía 'prohibido el paso'
"Oh vamos, cálmate Yuichi" se reiría la mujer entre caricias del chico que le besaba el cuello.
"Es que no puedo resistirme Yuno, ya estamos donde nadie nos verá ¿qué podría pasar?" Dirá el hombre mientras se quitaba la chaqueta queriendo quitarse el resto de la ropa y hacerlo con la chica que tenía en frente.
"Bueno, ciertamente ya estamos solos, y nadie nos podrá molestar Yuichi y la verdad, yo tampoco me puedo aguantar más" diría la mujer lamiéndose los labios y empezándose a quitar la ropa.
El chico estaba ansioso que se quitaría rápidamente la ropa con dificultad en el pantalón mientras la chica cuando also la vista ya se encontraba completamente desnuda y apareciendo su cuerpo curvilíneo.
"(Hoy la pongo papá, tu hombrecito se convierte en hombre!)" pensaría el hombre emocionado mientras la chica se le acercaba.
Esta posando una mano sobre el hombro del chico y acercándose al cuello de este oliéndolo haciendo que el chico sintiera un escalofrío por su columna.
"Yuichi, tenemos hambre" diría lamiéndole el cuello al hombre sorprendiéndolo por lo que dijo.
"¿Tenemos?" Preguntaría solo para sentir un dolor punzante en su hombro para ver cómo las uñas de la mujer se habían extendido clavándose en su carne haciéndole sangrar asustándolo y al regresar su vista al frente para preguntar, se quedaría paralizado al ver que ahora la piel de la mujer ahora era completamente blanca.
"Si Yuichi, nosotras tenemos hambre, de tu carne" diría la mujer mientras entre la oscuridad del almacén, varios de cientos de Ojos rojos aparecerían desde el techo y cuando la luz de la luna entraría por las ventanas superiores del almacén, mostrarían pegados al techo al revés cientos de criaturas que parecían mujeres pegadas a un huevo gigante con un ojo gigante encima, que se despegarían del techo volando gracias a sus brazos como alas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
