NO TIME TO DIE ── levi ackerman

BOOK ZERO. ─── DEEP END

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🗓️ ─── AÑO 841

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El alba, aunado al coro de las aves sobrevolando los muros de Shiganshina, fue la señal que Virginia Läckberg esperaba.

Acumuló desprolijamente todo lo que pudiera en la pequeña mochila que colgó en su espalda. Si contaba bien el tiempo, su padre despertaría en un par de horas; las suficientes antes de que ella ya se encontrara lo más lejos posible.

Cerró con cuidado la puerta de su habitación, caminó de puntillas e ignoró deliberadamente el cuarto de su hermana menor, cuya puerta estaba en paralelo a la suya. El martilleo de su corazón le insistió que, tal vez, no debería hacerlo así. Su madre le enseñó que siempre había oportunidad de hacer las cosas bien por mucha prisa que tuviera.

Lo quería desesperadamente, pero apretó sus manos en puños y desistió. 

Aguantó las ganas de tomar de la alacena un trozo de pan. No podría perdonarse llenar su estómago antes de irse, al menos no era así de desvergonzada. Sin titubear se acercó a la puerta de su casa y la abrió, evitando el crujir de la madera al repentino movimiento.

Cuando la atravesó y cerró detrás de sí, su corazón volvió a latir con parsimonia. Incluso aire que jamás había sentido comenzó a circular por sus pulmones. Como si hubiera vuelto a la superficie después de pasar años hundida en las profundidades de la tierra. 

No había nadie alrededor. Aún era temprano para que las actividades de la zona dieran inicio. Debía ser rápida. Por suerte conocía el camino.

Era mala idea internarse en las profundidades de las murallas. Sería cuestión de tiempo para verse envuelta en otro tipo de problemas. Su principal objetivo era uno abismalmente opuesto. 

Un siseo salió por su garganta cuando vio una de las puertas de las casas abrirse, de ella salió un hombre de traje, con un maletero amplio colgado de una de sus manos. Lo escuchó despedirse de alguien dentro. Al cerrar, sus ojos conectaron con los de ella.

Virginia reconoció los ojos verdes, una expresión de sorpresa surcando los labios del hombre. Su corazón se aceleró y de su boca salió un ruego silencioso, imperceptible incluso en la quietud de la mañana. No, por favor. No, no le diga a nadie. 

Bastaron un par de segundos para que el hombre se diera media vuelta, haciendo caso omiso a su presencia. Virginia agradeció el gesto, pero no lo dijo en voz alta, sabiendo que el contrario lo sabría de antemano. Después de todo, él era responsable, en cierta medida, del sufrimiento insistente que Virginia vivía dentro de su hogar. De su antiguo hogar.

Cuando dio media vuelta, cuando sobornó al velador de la puerta del Distrito Shiganshina y cuando corrió hacia el interior en busca de su nuevo destino, Virginia no se detuvo a pensar con detenimiento en ese giro de los acontecimientos. Una vaga alteración en su futuro. No sabía que el ciclo se distorsionó y tampoco le importó comprobarlo.

Ella pudo haber muerto ese día. En cambio, un capricho o un acto de generosidad la dirigió a un camino nunca antes transitado. Por su alma ni por ninguna otra.

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NO TIME TO DIE

Antes del Manuscrito ● EN LAS PROFUNDIDADES

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─── 𝐧𝐨𝐰 𝐩𝐥𝐚𝐲𝐢𝐧𝐠... «god must hate me», catie turner ───

Can't hold myself responsible
So I'll blame the metaphysical
If Jesus died for all our sins
He left one behind, the body I'm in
Same hands that made the moon and the stars
Got carpal tunnel and forgot some parts
I don't know what I believe
But it's easier to think
He made a mistake with me

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Ubicación temporal  🕰️ ------------------------ [no regrets]

📜🪶 | Donde Virginia Läckberg abandona todo lo que conoce para empezar de nuevo... y así su inocencia es arrebatada por aquello que más odia.

(inicio: - fin:)