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Aviso, este capítulo puede tener algo de spicy por lo que si te incomoda puedes saltarlo.

•♥︎•

Para cuando Yumiko se despertó nuevamente estaba en la habitación de Dottore recostada en un sofá, se sentía algo mareada pero para cuando intentó levantarse notó que tenía unas cadenas en el tobillo, ya sabía en que terminaria intentar quitarlas así que se sentó de nuevo y bajó la mirada para notar que estaba en una bata.

Ya sabía lo que le esperaba pero pronto recordó el cuerpo de su amiga muerta, los fatuis casi matándola y Dottore explotando sus cuerpos como si nada, sintió náuseas y su cuerpo tuvo escalofríos mientras intentaba olvidar lo que había visto o terminaria mas traumada de lo que ya estaba.

Después de una horas Dottore por fin entro a la habitación ignorando a Yumiko como si sólo él estuviera en la habitación, se quitó la camisa y se pasó una mano por su desastroso cabello mientras se ponía una camisa limpia y por fin se daba la vuelta para ver a Yumiko que se enfocaba mas en mirar el techo con tal de no hablar con el.

-Levántate, te quiero fuera de aquí.

-Estoy encadenada Dottore, no me puedo ir.

Dottore camino hacia ella agarrándola de la muñeca jalandola para que se fuera pero pronto las cadenas lograron que Yumiko se tropezara y Dottore agarró un martillo haciendo que Yumiko rápidamente retrocediera con miedo.

-No me vas a romper otro hueso Dottore, me voy a quedar aquí.

-Vaya que puedes ser terca cuando quieres.

Yumiko miro con miedo y odio a Dottore antes que este dejara el martillo a un lado y la jalara para sentarse de nuevo en el sofá, miró a otro lado incómoda y Dottore solo se enfoco en quitarle las cadenas hasta que estas por fin cedieron y liberaron el tobillo de Yumiko dejandole toda la libertad para escapar si eso era lo que quería pero Yumiko no se movió ni un centímetro.

-Lárgate.

-Tengo una pregunta.

-No tengo tiempo para tus-

Yumiko agarró de la camisa a Dottore acercandolo mas a su cara, sabía que aquel pequeño acto de rebeldía la dejaría con mas cicatrices de las que ya tenía pero en ese momento no le importaba, quería saber la verdad.

-Tu mataste a Sohreh? mataste a Jules?

La habitación se quedó en silencio por unos segundos, la mano de Dottore pronto agarró su cuello y Yumiko chillo mientras trataba de empujar su mano.

-Si te mato ahora tal vez podria decirtelo

-Si me matar te quedas sin experimentos

Dottore frunció el ceño y su agarre se volvió mas apretado cortando el aire por completo a Yumiko.

-Sohreh era demasiado ingenua, confío en mí a pesar de los rumores y cuando se dio cuenta de que todo era verdad fue muy tarde como para escapar, tu amiga Jules solo se me fue encargada para matarla después de involucrarse en algunos asuntos de los fatui.

Pronto la mano de Dottore abandonó su garganta y Yumiko abrió su boca con tal de recuperar el aire pero Dottore presiono sus labios con los de ella como si se sintiera frustrado, tenía toda oportunidad de matarla pero no lo hacía y eso parecía frustrarlo mas.

-Cuando te conoci me di cuenta que eras mas interesante que Sohreh, parecias frágil pero eras lo suficientemente inteligente para no hablarme y alejarte de mi

Dottore bajo hasta llegar a su cuello donde empezó a repartir besos y mordidas fuertes que la hacían casi sangrar haciendo que Yumiko se quejara mientras intentaba empujarlo.

-Intente deshacerme de ti, odio encariñarme con algo pero cada intento siempre tenía que fallar

-Zan..Dottore!

Yumiko intentó patearlo pero Dottore jalo su bata hacia abajo besando su clavícula mientras trazaba círculos perezosos en su cintura haciendo que esta temblara.

-Detesto que me llamen por mi nombre aunque tu..eres un maldito virus del cual me tengo que deshacer.

-M-Me amas..

Dottore se detuvo cuando Yumiko pronunció esas palabras, se alejó tan rápido como cuando se acercó y Yumiko se acomodó la bata mientras jadeaba y empezaba a conectar los puntos.

-No me has matado por que me amas, me proteges del peligro porque te importo!

-Te voy a matar Yumiko

-Hazlo entonces! Matame como mataste a Sohreh! Matame como mataste a Jules! Quitame la vida y entierrame en la nieve como si no fuera nada!

Dottore la silencio con otro beso y esta vez Yumiko lo aceptó enredando sus dedos en su pelo turquesa, quería jalarle el pelo y hacerlo enojar pero también quería que la tocara, solo unos segundos más.

Dottore la levantó y la empujó contra la mesa donde se encontraba el martillo mientras le arrancaba la bata y luego la ropa interior acariciando su intimidad sin vergüenza alguna haciéndola temblar.

Yumiko miro a otro lado mientras intentaba alcanzar el martillo, podía matarlo, podía pegarle en la cabeza y escapar antes que fuera tarde pero después recordó su pasado, como se emocionaba cada vez que miraba a Zandik y como deseaba que le hablara con tal de conocerlo más a fondo y entender porque todos parecían temerle.

Yumiko se sentia estupida como una adolescente nuevamente, se sentía enamorada y al mismo tiempo disgustada pero sabía algo, Dottore era ahora su única forma de mantenerse con vida y dinero despues de quitarle el trabajo, si lo mataba no tendría a donde ir y el hospital la despediría, incluso la cura que ya había creado probablemente se acabaría.

No podía matarlo y no quería, Yumiko se recostó en la mesa sintiendo sus pensamientos un desorden y mientras Dottore la exploraba con ansiedad ella solo pudo llegar a una conclusión, tenía que quebrar a Dottore como él lo hizo con ella.

•♥︎•

Lamento no publicar capitulos estos dias, estoy algo ocupada y tambien no del mejor humor pero espero les gustara este capitulo.

Doctor, where is my medicine? (Dottore x lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora