Capítulo 3-

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Su lengua en mi coño hace maravillas,
me lleva al cielo a segundos y me baja
al infierno a momentos.

1Que hombre por dios!

Desliza su lengua entre mis pliegues
y presiona su nariz contra mi clítoris,
mi centro nervioso está tan duro que
no tengo con que compararlo en estos
momentos.
Estira su mano por debajo de mi
vestido y lo aprieta fuertemente, todo
esto no hace nada más que seguir
excitandome, mis caderas se mueven
por si solas en busca del calor de su
boca.
Mientras está hace milagros en mi
interior, agarrando fuertemente su
cabello lo incito a ir más deprisa,
sintiendo su risa en mi coño al
tenerme tan desesperada.
Lo está disfrutando. Le encanta
tenermne así de sumisa y necesitada
ante él. Lo hace sentir poderoso de
cierta manera. Y yo amo darle este
poder.
Vegeta sin duda alguna es la persona
por la que he esperado los veinte años
de mi vida, saberlo tan cerca y tan lejos
a la vez es triste, pero ahora es mío, y
de nadie más. Soy posesiva, soy celosa,
y muy egoísta.
Así que si cree, que puede andar
Conmigo y estar revolcándose con
otras está muy pero muy equivocado.

La presión entre mis piernas está casi
al límite cuando desliza dos dedos
dentro de mí. No puedo creer que
realmente esté en mi coño. Empujo
hacia su mano, mientras sigue
lamiendo, oscilando entre sus dedos y
su lengua.
Llevándome a un orgasmo inevitable,
mis músculos se contraen alrededor
suyo, los dedos de mis pies se encogen
y mis ojos se mueven detrás de mi
cabeza, me estoy corriendo fuerte y
sucio sobre su boca.

El lame con desesperación mi
liberación, pero puedo ver en sus orbes
Negros que está enojado, muy enojado.
Había dicho que mi primer orgasmo
era para su polla, pero al parecer no
pude cumplir con eso y ahora está
enfadado.
Me da vuelta bruscamente cuando
las réplicas de mi orgasmo terminan
colocándome de rodillas sobre el
escritorio.
Sus fuertes movimientos me hacen
jadear, logrando abrir mi boca de par
en par, el cambio fue un poco brusco.
Levanta mi vestido y empuja mi culo
en pompa, ¡ay dios! ¿Que querrá
hacer? yo soy virgen por todas partes y
se de sobra que el sexo anal duele.

Vegeta- No te quisiste quedar tranquila cómo
te lo pedí, te dije que no te corrieras y
me desobedeciste -agarró un puñado
de mi cabello con su mano y tiró de
mi cabeza hacia atrás mascullando en
mi oído-.Y no sabes cuánto odio las
desobediencias.

La madre que lo parió, esto lejos de
asustarme, me excita. ¿Que está mal
conmigo?
Vegeta-Eres una maldita zorra, ¿pero sabes
algo cariño?-sonríe malevolamente
pasando su lengua por mi cuello-. Yo
me encargaré de enderezarte.
Jodida puta

Este hombre y su sucio lenguaje serán
seguramente mi perdición.
Trato de dar media vuelta para ver
qué planea pero su agarre persiste
fuertemente en mi cabello y entonces
lo escucho.
El sonido de una hebilla al ser safada
del pantalón, ni siquiera me deja
acostumbrarme a la idea, cuando
el primer golpe impacta contra
mis nalgas, el dolor se expande
rápidamente por mi cuerpo y grito.
Luego de ese golpe vinieron dos
más pero al tercero ya no sentía
dolor sino más bien placer, el
sabía perfectamente lo que hacía,
seguramente perdí la cuenta de los
golpes que mi blanco trasero recibió
pero sin duda esto me sirvió para
darme cuenta de que soy una jodida
pervertida que ama los azotes.
¿Estoy enferma?
Seguramente, pero oye mientras tú me
juzgas yo disfruto.
Vegeya- Espero que hallas aprendido la
lección niña, no me gustaría tener que
golpearte de nuevo este blanco trasero-
gruñe amasando mis glúteos con
deseo.
Pues yo sí que lo quiero.
- Ahora dime algo, ¿eres virgen?
Sus ojoS me intimidan de sobremanera
y tiemblo bajo su agarre, ¿Y si ya no me
quiere por que soy virgen?¿Y si...?
Mis ojos se llenan de lágrimas mientras
me recompongo tratando de arreglar
mi vestido y alejarme de su agarre.

Vegeta - ¿Que pasa bebé? He echo algo
mal- la vulnerabilidad en su voz me
hace querer golpearme por ser tan
insensible con él, aungue parezca un
tipo duro, es una dulzura de persona.

Bulmq-Yo creo que es mejor que me vaya
Vegeta - susurro tratando de no mirar
sus ojos.
Vegeta- ¿Pero hice algo mal, respóndeme?
No lo mires a los ojos por favor, no lo
mires a los ojos, no lo hagas.
Mierda.
Bulma - Yo lo siento tanto vegeta, seguramente
creíste por como me comporté
que tenía experiencia y podría
complacerte, pero yo no la tengo.
Vegeta - Yo no dije eso en ningún
momento-masculló enojado.
Bulma - Soy virgen vgeta- confieso mirando
hacia otro lado.
Sus manos viajan hacia mis mejillas
obligándome a mirarlo.
Vegeta - Y nada me gustaría más en este
momento que ser el primnero en hacer
explotar tu cereza bebé.
Bulma - ¿Lo prometes?
Vegeta - Lo juro cariño.
Sonrío mirando fijamente sus labios
pidiendo a gritos ser besada.
Aunque parezca irónico hemos echo de
todo desde que nos conocimos excepto
besarnos.
Quiero que mi primera vez en todo sea
con él y eso incluye mi primer beso.
Captando el mensaje se acerca a
mis labios y los toma en su posesión
absorbiendo mi inexperiencia con
ellos, trato de seguir el ritmo a sus
besos, mis rodillas flanquean. Me
pone de espaldas para poder besarme
mejor. Separo los labios para aceptar
su lengua, acariciando sus fuertes
brazos, y agarrando su camisa y rompiendola interrumpe nuestro beso
para Mirarme con asombro.
Vegeta - Eres salvaje bebé-sonríe
Bulma - Solo contigo- muerdo su labio
inferior-, Además tú destrozaste mis
bragas.
Vegeta - Oh joder.

Vuelve a tomar mi boca entre las suya
con pasión mientras yo acaricio sus
hombros bañados en sudor y la parte
superior de su espalda.
Gimo cuando
me lame un rastro por la garganta
hasta el pecho. Y se prende de mis
pezones como si fueran agua en el
desierto.
El dolor en la parte baja de mi
estómago se hace presente de nuevo,
enviando ráfagas y más ráfagas de
placer a mí muy necesitado clítoris.
Abriendo mis piernas sin detener el
beso, colocó su pelvis a la altura del
mío, para luego echarse para atrás
quedando montada justo encima de su
polla.
Sin cortarme ni un poCO me comencé
a mover encima suyo en busca de mi
liberación, pero inmediatamente él
me volvió a colocar de espaldas para
gruñir contra mis labios.
Vegeta - Basta de juegos, hora de follar.
Mis ojos se abrieron de par en par y mi
boca se secó.
¿Esto en verdad está sucediendo?

SEÑOR OUJI🔥❤️🫠🫠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora