"Wonnie ¿Puedo pedirte un besito prestado? Te prometo que te lo devolveré"
~Donde Lily quiere declararse a Haewon de una manera creativa
ADAPTACIÓN → Autora original @PRINCECH4N
Al final, Lily se quedó dormida acurrucada contra Haewon, quien luego de unas horas decidió llevarla a su cama para que duerma más cómodamente. Fue difícil hacer que la suelte, Lily la abrazaba como un pequeño koala y no la dejaba ir. Revisó la hora y ya pasaban las doce, quizás dormir sería una buena idea.
Como pudo cerró su laptop y la dejó sobre la mesa de la sala, además de sus cuadernos y demás cosas, para luego hacer una maniobra y hacer que Lily enrosque sus brazos en su cuello, para que así ella pueda alzarla desde los muslos y llevarla con más facilidad. Caminó hasta el cuarto de la mayor y abrió la puerta, entrando en éste. Despegó una de sus manos del cuerpo de Lily para desarmar la cama y poder dejarla dentro de las sábanas, pero cuando iba a hacerlo la menor tomó su mano, sin intenciones de soltarla.
Haewon soltó una suave risa, bueno, al parecer ahora tendría que dormir con ella. Se quitó el hoodie, dejándose puesta la blusa y los pantalones deportivos, para luego meterse bajo las sábanas junto a Lily. Apenas terminó de acomodar las sábanas, sintió unos delgados brazos abrazar su cuerpo firmemente, y una cabellera azabache enterrarse en su cuello.
Si fuese por ella, ya estaría muerta de la ternura. A Haewon le parecía sumamente tierno aquello, una muestra de cariño muy bonita, sus ojos se cerraban y comenzaba a sentirse cansada, por lo que no rechistó y cayó dormida al instante.
Inconscientemente abrazó la cintura de Lily y pasó su pierna por sobre las contrarias, encerrándola entre su cuerpo de una manera cariñosa. Lily durmió cómoda, con la cabeza en el pecho de Haewon, sintiendo los tranquilos latidos de su corazón.
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La mañana siguiente fue entre cómica y sorpresiva. Lily se despertó con su alarma y se encontró encerrada entre los brazos y piernas de su roommate, y con su rostro peligrosamente cerca del suyo. La universidad podía esperar un rato, estaba demasiado cómoda allí. Lily se acomodó entre los brazos de Haewon, para así poder admirarla. Una sonrisa se pintó en sus labios y sus mejillas tomaron un color rojizo.
Haewon se levantó media hora más tarde, con Lily durmiendo plácidamente sobre su pecho. Unas inmensas ganas de besar sus mejillas se instalaron en el corazón de la coreana, pero no iba a hacerlo. No le gustaba Lily ¿Cierto? La veía sólo como una amiga, creo. Tomó su celular que estaba en la mesita y lo encendió, mirando la hora. ¡Eran más de las nueve y media! Ya había faltado a dos clases, estaba perdida.
Se removió en su lugar, dispuesta a levantarse y darse una ducha rápida para irse a la universidad. También para despertar a la australiana y decirle que haga lo mismo. Cuando quitó sus manos de su cintura Lily despertó inmediatamente, removiéndose sobre el cuerpo de Haewon y quejándose un poco.
