feelings

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Habían pasado dos semanas desde que Louis llevó al omega a su casa y se despidió de él con un abrazo y unos besos en sus mejillas.

Luego de aquello, el alfa le preguntaba como se encontraba cada día y tenía cortas conversaciones con el omega por chat.

Pero eso no era suficiente para que no dejara de extrañarlo.

Él no era alguien que tuviera muchas parejas, tuvo dos o tres en sus veintiocho años de vida. Ninguna de ellas fue una relación seria.

Solo era él y un omega, compartían fetiches y decidían salir para cumplirlos, una vez que ya no querían probar algo ni aquellos omegas, ni él, dejaban la relación.

Era lo que se podía considerarse 'mujeriego', aunque solo se acostó con una o dos omegas en su vida. Pero, el resumen de su vida, podría ser la palabra 'sexo'.

Noches de fiestas locas, condones en sus bolsillos, sexo en baños de pubs, bares y clubs.

Hasta que su amigo abrió aquel club que de nombre era 'Cherry'. Aquel amigo se llamaba Liam, un alfa de veintinueve años que tenía un omega llamado Zayn de veinticuatro. Los cuales compartían algunos gustos que él mismo tenía con el sexo.

Pero lo de ellos era más extremo. Les gustaban muchas de las prácticas del BDSM, mientras que a él, solo algunas.

Así que sí, se podría decir que la vida de Louis Tomlinson se resumía en trabajo y sexo.

Claro, hasta que llegó Harry.

Aquel omega de rizos suaves, de color chocolate y de olor a fresas. Aquel chico que, tenía pareja.

Y Louis no sabía que hacer, nunca había vivido algo así, y aún así, no podía dejar de pensar en el omega.

Una y otra vez. Que si Harry esto, que si a Harry aquello. Incluso se encontraba pensando constantemente en las comidas que le podrían gustar al omega. Estaba loco.

Y, por supuesto, tenía sentimientos encontrados.

Estaba confundido por sus recientes sentimientos por el onega de ojos verdes brillantes.

Y también enojado por como Nick trataba a alguien como Harry. Un omega muy bonito y adorable.

También se encontraba imaginando escenas cursis como ver películas de amor con Harry, durmiendo acurrucado con él y bastante más cosas que antes le daban hasta arcadas pensarlas.

¿Qué le estaba pasando?

¿Sería la edad? ¿El fin de los veinte y el principio de los treinta? Vamos, que tenía veintiocho, que aún le quedaba para los grandes treinta.

Había intentado olvidarlo. Se obligó a ir a fiestas e ir a 'Cherry' todos los días, y nada. Ningún omega captaba su atencion, y ninguno hacía que se excitara.

Pero ese omega, no se iba de su cabeza.

Por eso, cuando esa tarde su teléfono sonó, lo contestó sin siquiera saber quien era, ilusionándose porque... ¿Y si era el omega?

- ¿Hola? - contestó con rapidez.

- Hola, Louis. ¿Qué tal? - y para su fastidio, era Nick.

- Oh, bien... Quieres hacer otro tío o algo, ¿no?

- No... Es algo diferente lo de esta vez. Verás, quiero follarme a unas betas y omegas, como una orgía y... Bueno, Harry no me lo permitirá hacer si no estás tú.

Louis suspiró, ese tío quería experimentar con otras mientras estaba con Harry.

- Escúchame, Nick. Si tú quieres experimentar con más personas, no haberte metido en una relación seria - explicó Louis, algo harto.

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⏰ Última actualización: Sep 20 ⏰

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