Lazos De Sangre "Kwon x Tory"

VIII

Pov Tory.

Estaba caminando hacia mi habitación, la conversación con Miguel no había salido para nada bien.

Necesitaba descansar.

Apenas abrí la puerta y el sonido de unos gritos y un golpe me recibe.

-Rindete de una vez Alex, esto es mío!.

-Brincos dieras Tiger.

Cierro la puerta y me adentro en la habitación. Nada me había preparado para lo siguiente que vería.

Kwon y Alex están frente a frente en una mesa, ambos sujetando un tenedor, mirándose con desprecio y lo único que los separa en un plato con un trozo de pastel de chocolate.

-Otra vez peleando por comida?.

-No es el cualquier comida, es el mejor postre de chocolate de este hotel. -aclara Alex sin despegar la vista de Kwon y apretar con fuerza aquel tenedor -Y el tonto de tu novio no me lo quiere dar.

-Y porque no me lo das tu a mi?, por qué debo ser yo el que sede?.

-Por que soy la mayor y me debés respeto.

-Solo por dos años y no te debo ni madres!.

Ambos dan un golpe a la mesa y se levantan. Yo solo puedo poner los ojos en blanco.

-A veces son peor que niños!.

Me acerco a Kwon y lo beso en la mejilla, el me voltea a ver con una sonrisa.

-Matanga.

Alex en un rapido movimiento inserta su tenedor y jala el plato.

-Espera que?!. No eso no se vale.

-Lo siento pero en la guerra y en el amor todo se vale. Y el que se duerme pierde y bueno amigo. Cómo dice el totol, Jodete.

Se burla mientras toma un trozo del pastel y le da una mordida. Kwon se sienta y se cruza de brazos.

Me acerco atrás de él y lo abrazo, esto lo relaja, toma mi mano y la besa.

-No seas cruel Alex. Se distrajo por mi.

-Y te lo agradezco mucho.

-Te guarde un poco de pizza.

-Gracias, pero sabes que no soy fan a la Hawaiana.

-Es de peperoni.

-Oh en verdad?- estaba algo sorprendida. Tomo una rebanada y estaba deliciosa, era con la orilla rellena -Gracias.

-Por cierto, esto es para ti.

Kwon me entrega las llaves de su auto y yo solo lo miro con confusión.

-Que es esto?.

-Las llaves de mi auto.

-Eso lo sé, pero, por qué me las das?.

-Te dije que te daría todo lo que pidieras, querías una pizza ahí está y también me dijiste que querías mi auto.

-Solo bromeaba, nunca creí que fueras a dármelo.

-Te dije que lo tendrías, así que es tuyo.

-No puedo aceptarlo, además tú con que te vas a transportar?.

Intento persuadirlo, el se acerca hasta mi.

-Puedo comprar otro o Álex me puede llevar.

-Ni lo pienses yo de chófer, ni de coña y menos tuyo.

Alex come de su pastel mientras mira la televisión.

Veo las llaves, no podía aceptarlo, era algo muy caro.