I

27 2 0
                                    

Siempre que alguien le decía al sacerdote algo que tiene que ver con eso, esa persona desaparecía y todos sabían la verdadera razón, o eso creían, más nadie se atrevía a decir algo al respecto ya que sabían que podía llegar a pasarles lo mismo que a esa persona, todos sabían el por qué esa cosa estada ahí con el sacerdote sin embargo nadie sabía la verdadera razón de el por qué permanecía ahí y el sacerdote no parecía importarle y tampoco sabían el como llego a pasar todo eso.

Tampoco se atrevía a preguntar, apesar de que ellos vivían en uno de los pueblos que se conocía por principalmente tener una iglesia encargada de exterminar a los vampiros o al menos para los que realmente sabían sobre esto ya que las personas comunes no sabían nada al respecto solo pensaban que era una iglesia comun y corriente y aún haci tenían a uno con ellos en la iglesia paseando por el lugar como si nada, incluso a ellos les pareció raro, pero por miedo a que les pasará algo simplemente lo aceptaron y no decían nada al respecto o al menos no en voz alta y mucho menos dentro de la iglesia o de su base principal.

Pero lo que si sabían era que para su suerte les ayudaba a exterminar a otros vampiros aún que no sabían el por qué lo hacía si era uno de ellos más no pensaban darle muchas vueltas al asunto después de todo su ayuda era muy buena ya que podían defenderse mucho mejor contra ellos y sus ataques, o al menos contra los vampiros comunes ya que no podían hacer mucho contra los de alto nivel los cuales solían ser los vampiros que normalmente estaban cerca del rey o eran algunos de los hijos del rey aun que ellos casi nunca aparecían y tampoco sabían mucho sobre los de alto nivel por lo que tampoco era que pudieran hacer algo al respecto.

Aun qué el vampiro tampoco les decía mucho al respecto por lo cual para ellos no se les hacía de mucha confianza y tampoco sabían nada de el, algo que solo hacía que su desconfianza creciera más, ni siquiera sabian si era un vampiro comun o uno de la nobleza o puro, un que muchos decían que podría ser de uno puro otros decían que no por qué nunca le habían visto pelear y que podría ser solo un vampiro normal que posibilidad busque refugio al haberse metido en problemas no había información concreta sobre el.

Los vampiros puros eran aquellos que habían nacido de dos vampiros y los nobles eran vampiros los cuales fueron los primeros vampiros que existieron y formaron familias las cuales se hicieron nobles entre los vampiros al ser los primeros en existir y los más importantes, aquellos vampiros que son nobles o puercos pueden estar en el sol sin ninguna tipo de problemas y además de que son aún más rápido y fuertes que los vampiros comunes además de tener la habilidad de hacer que un humano deje de ser uno y se convierta en un vampiro, los vampiros comunes por su parte son impuros ya que son aquellos humano que decidieron ser vampiros por lo cual estos no pueden estar en el sol además de que son más descontrolados que los puros debido a que en un principio sienten una necesidad insaciable de beber sangre las primeras semanas posteriores a su transformación aún que si pueden llegar a controlarse y pueden salir a la luz con algo de protección.

Aún que bueno no todos conocen toda la información solo conocen una parte e incluso la información que tienen no es toda por lo cual aún desconocen una parte y más cosas sobre ellos.

Otro día normal pasaba en la iglesia que guardaba miles de secretos a los habitantes de aquel pueblo, en una habitación algo oscura debido a la falta de luz y alejada de todas las demás se encontraban dos personas las cuales hablaban tranquilamente la liguera luz de la luna entra por la ventana dejando ver el rostro de ambos uno de ellos era de cabello castaño y sus ojos eran de un collar e avellana con reflejos rojizos y de tez palida haciendo que sus largas pestañas y los finos colmillos que sobre salían de sus labios debido a la pequeña sonrisa que tenía el otro era de cabellos oscuros y mechones blancos sus ojos eran de mismo color que su cabellos y tez palida pero no tanto como la otra persona, siguieron hablando hasta que se escucha la puerta ser tocada ambos guardan silencio.

El vampiro del sacerdote Donde viven las historias. Descúbrelo ahora