Saiyajin Ingeniero.

Capítulo 2: ¿Extraño?

Mi mirada se posó en Bulma, con ambos brazos cruzados y una expresión firme, hablé:

- No-

- ¿Eh? ¿Y porque no?- ella preguntó en confusión.

Por su tono y la forma en que actuaba, me daba la sensación de que ella no era de los que se rendían facilmente.

Para su desgracia, yo tampoco.

- Esta Dragon Ball tiene un gran valor para mi - dije en un tono calmado.

Mi nerviosismo anterior aún seguía vigente, pero no podía simplemente ceder y entregarle la herencia de mi abuelo a una desconocida.

- ¿De cuanto estamos hablando?- ella me preguntó.

Entrecerré mis ojos por un momento, mientras la miraba fijamente.

- ¿De que hablas?- pregunté con una sonrisa inocente mientras me acariciaba la parte posterior de mi cabeza.

Ella solo me miró con cara de póker, como si no acabase de procesar el como la conversación pasó de seria a cómica en un solo dialogo.

- ¿Tú....no quieres dinero?- ella me preguntó con incredulidad.

Acaricié mi cabeza con confusión antes de tomar la palabra.

- ¿Que es el dinero?- pregunté con curiosidad.

La cabeza de Bulma pareció empezar a dar vueltas, pero de inmediato se recompuso y sonrió de una manera extraña.

Llevó sus manos hacia su falda y lentamente la levantó, revelando su ropa interior.

- ¿Que tal? ¿Te gusta? A los chicos de tu edad les gusta esto- ella dijo en un tono extraño pero divertido.

La miré con curiosidad, ¿Era eso cierto? ¿Los chicos de mi edad disfrutaban de esto? ¿Debería gustarme? Realmente no estaba seguro.

No cedas.

Sus palabras me sacaron de mis pensamientos y asentí mentalmente antes de mirarla nuevamente.

-No - me negué en un tono suave, lo cuál pareció decepcionarla un poco.

- Eres aburrido...- ella dijo en un puchero antes de llevar su mano a su barbilla, pensativa.

Imité su gesto, y ambos nos miramos mutuamente mientras hacíamos los mismos gestos, analizandonos mutuamente.

Nos quedamos así por unos segundos, que se volvieron minutos, hasta que finalmente ella tomó la palabra:

- ¿Que te parece esto?- ella preguntó y la miré con curiosidad - Conocimiento, eso es lo que te ofrezco-

No le hagas caso.

- Te escucho- dije en un tono curioso.

Ella sonrió complacida al escuchar mi respuesta.

- Eres bastante habil ¿No es así? Pareces ser un chico listo ¿Te gustaría que te enseñe una cosa o dos?- ella preguntó con una sonrisa mientras extendía su mano- O algo mejor.....¿Que te parece si vienes conmigo? Así solo tendrás que prestarmela un momento cuando tenga el resto, y luego te la devolveré-