Capítulo 185 - 186

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Mo Kaifu respondió de inmediato: "En total, son 120 wen."

Mo Kaifu pensó que el precio de este plato era algo que Murong Lingran había mencionado al azar, así que no hizo más preguntas.

"Entonces, ¿para nueve jin?"

"En total, son 180 wen."

"Las coles chinas siguen siendo 20 wen por jin, las verduras verdes 20 wen por jin, y las espinacas 25 wen por jin. Si el cliente quiere 8 jin de coles chinas, 9 jin de verduras verdes y 9 jin de espinacas, ¿cuánto se debe cobrar en total?"

Mo Kaifu solo pausó un momento y de inmediato respondió: "En total son 565 wen."

Murong Lingran asintió con satisfacción. Esto había salido bien, y sonriendo dijo: "Felicidades, has sido seleccionado."

Mo Kaifu, todavía joven, saltó de alegría al escuchar esto y rápidamente dijo: "Gracias, señorita, no, gracias, jefe."

"No tienes que agradecer, simplemente tienes la capacidad."

Mo Kaifu, un poco torpe, se tocó la nuca y dijo: "Aun así, gracias, jefe."

La señora Xia, viendo a su hijo ser seleccionado, se sintió extremadamente emocionada. Quería llevar a su hijo a agradecer a la familia Murong, pero al ver que todos estaban ocupados, tuvo que desistir.

Mientras tanto, el progreso de Murong Lingran fue bien. De los otros tres hermanos, dos también fueron seleccionados.

Pronto comenzó la segunda ronda, y en poco tiempo se seleccionaron exactamente seis personas de los diez, todos hombres y jóvenes de entre quince y veinte años.

Poco después, se determinaron las seis personas que recogerían las verduras, algunas de las cuales habían ayudado anteriormente a limpiar los terrenos o construir la casa de bambú para la familia.

Cuando el resto de los aldeanos vio que el número de seleccionados ya era suficiente, empezaron a desanimarse y a prepararse para irse. Entonces, Murong Lingran dijo de repente: "Por favor, esperen un momento."

La multitud se detuvo al escucharla y ella continuó lentamente: "Mi familia compró hace un tiempo 20 mu de terreno en barbecho. Esta vez necesitamos mucha mano de obra. Aquellos que ayudaron a limpiar terrenos la última vez, si desean venir, los aceptaremos a todos."

"Para los demás que deseen unirse, siempre y cuando cumplan con los requisitos que acabo de mencionar y aprueben la entrevista, también pueden unirse. Claro, el trabajo en el campo sigue siendo 30 wens al día, sin comida incluida al mediodía."

Al escuchar esto, la multitud, que había estado en silencio, estalló de inmediato en murmullo. ¿La familia Murong había comprado en silencio otros 20 mu de tierra? Acababan de construir la casa, ya podían vender las verduras, y ahora tenían aún más tierra. ¿Acaso la familia Murong realmente se había convertido en la familia más destacada del pueblo Li Hua?

La gente comenzó a registrarse activamente, y el ambiente se animó nuevamente.

Una mujer que no se había ido aún, al escuchar las palabras de Murong Lingran, cambió de expresión y, en lugar de regresar a casa, se dirigió hacia otra dirección.

"Yo... yo quiero unirme."

"Y yo... también quiero unirme."

"Yo también."

"Yo también."

Murong Zong rápidamente dijo: "Está bien, uno a la vez para la entrevista. Los que sean aprobados, regresen hoy a arreglar sus asuntos en casa, y mañana podrán comenzar a trabajar."

Renacimiento de la encantadora niña en el espacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora