Todo es coincidencia.⭐

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Verano del 2015 ⭐

Desde que nacemos hasta que crecemos atravesamos diferentes sucesos impactantes que hacen creer que nada es coincidencia y que todos tenemos un destino, que pase lo que pase no van a cambiar los sucesos y lo único que cambia es el tiempo en el que tardan en pasarnos.
Yo creo que todo eso es mentira, las cosas nos pasan por algo y tengo una fé impresionante de que todo puede pasar, un día podemos estar completamente enamorados y al día siguiente queremos matar a esa persona porque no es que nosotros como seres humanos cambiamos, si no; nuestros pensamientos, los sentimientos y nuestra manera de resolver nuestros problemas cambian completamente, porque puede ser que nos hayamos dado cuenta que algo hicimos mal o que esa persona nos lastimo. Tal vez y puedan ser ambos casos, porque las cosas malas que nos suceden siempre tienen un dicho y hecho que provoco que todo esto nos estuviera ocurriendo; igualmente que las cosas buenas siempre nos suceden porque hacemos las cosas con intenciones puras. Tal vez luchaste por lo que querías, tal vez sacrificaste algo por alguna persona sin recibir nada a cambio o tal vez le salvaste la vida a alguien.
Porque todos tenemos la oportunidad de decidir que es bueno y que es malo, hay personas que hacen cosas malas por su beneficio propio y personas que hacen cosas buenas por el beneficio de los demás sin darse cuenta que al hacer esa acción por ver a los demás bien, hace sentirnos satisfechos con nosotros mismos. Y todo tiene causa-consecuencia, finalmente todos los sucesos que nos pasan en nuestra vida, suceden a través de nuestros actos sean buenos o malos. Simplemente, el destino esta formado por una serie de coincidencias, que solamente recurrimos cuando no sabemos explicar algo... Y eso es lo que siempre digo cuando me suceden cosas inexplicables, que a veces solo pasan muy pocas veces en tu vida. Me enamore de alguien cuando estaba en la mejor etapa de mi vida, durante un tiempo la gente me hacía daño y después desperté y vi mi vida pasar delante de mí, estaba muerta internamente, el color café de mis ojos ya no era de un amanecer mi mirada se convirtió rápidamente en ojos tristes, el color rojo de mis mejillas iba desapareciendo lentamente, mis manos eran secas que mi contacto de piel a piel ya no expresaba nada, mi sonrisa blanca como las perlas del collar que le regalaron a mi madre desaparecía en cada suspiro que daba, mi alma perdía su esencia poco a poco. Hasta que algo en mí despertó, porque olvidé lo especial que era, me hicieron sentir como basura cuando en realidad era arte encerrado, después de mi caída desde el lugar que más admiraba supe perfectamente que debía de alejarme de lo que me consumía que era el mismo infierno donde estuve todo ese tiempo. Me odiaba y odiaba a todos porque éramos iguales pero cada quién con diferentes gustos y características físicas, ese lugar y cada persona eran demasiado comunes y no mostraban algo inconcebible, eran paredes blancas o tatuajes sin ningún significado especial pero había algo en mí que me hacía diferente a ellos, mi cuerpo interno tenía pintados paisajes hermosos y figuras abstractas de diferentes colores y texturas, estaba limpia tenía intenciones completamente puras y llegó él: «una coincidencia hecha destino.» Me hizo ver un camino lleno de belleza; paisajes, galaxias, pinturas, flores, planetas y luego me otorgo el don de explotar la esencia de mi belleza interna, de pintar arte desnudo sin tener miedo a que me juzguen, a conocer y admirar lo desconocido por el resto de mi vida aunque él ya se haya ido.

El arte de amar lo inexplicableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora