La rubia aún seguía ignorando a aquellos dos chicos que la habían hecho llorar todas las noches... Ahora ambos se paseaban juntos por el instituto sin alejarse unos cuantos centímetros uno del otro parecía como si se hubieran pegado con goma así mismos.
Pero aquella cercanía no era lo que la rubia pensaba, era todo lo contrario, la cercanía que tenían ambos era para hablar de la rubia y de como ambos se dieron cuenta de la ley de hielo que les hacía. Los jóvenes estaban en la cafetería mirando discretamente al grupito en el ahora Navia se encontraba, rodeada de los amigos de su novio y claramente de aquel individuo.
—Esta actuando como una niña pequeña.
—Es muy linda cuando actúa así. Wriot alzó su ceja al ver la cara de embobada que tenía la chica, está solo se disculpo.
—No entiendo, ella fue la que cometió el error de andar con Alhaitham y tenemos que andar detrás de ella.
—Mhm... Navia siempre ha sido así.
—¿No te molesta?
—¿Molestarme? No, para nada. El pelinegro no entendía el amor que le tenía su ahora amiga a su "ex archienemiga" él al igual que Clorinde conocía a la joven y siempre había sido un fastidio lidiar con ella.
Su forma de ser era fastidiosa, sus caprichos, sus berrinches y la manera en que siempre hacia que la peli azul fuera detrás de ella le irritaba al joven, pero no podía juzgar a la rubia por ser así. Él quería creer que la joven era diferente con la peli azul, pero como actuaba ahora parecía que no.
—Creo que nunca las voy a entender por más que trate.
—Supongo que solo nosotras podemos entendernos. El pelinegro solo le sonrió para luego ver dónde se encontraba aquella rubia mirándolos con odio, este solo se rio al verla así.
El joven apartó su mirada ahora devolviéndola a su acompañante tomando entre sus dedos un mechón de cabello azul jugando con este el pelinegro solo miro de reojo el rostro de la rubia.
—¿Qué haces?
—Solo fastidió a tu noviecita. Clorinde quedó atontada al escuchar eso, mirando hacia los lados para luego chocar con la mirada de su "noviecita".
Clorinde intento apartar su mirada, pero sentía que eso iba a empeorar la situación aún así los brazos del pelinegro rodearon suavemente el cuerpo de la peliazul.
A lo lejos la rubia solo podía apretar su mandíbula del enojo que sentía en ese momento ¿Cómo se atrevían hacer eso en frente de ella? Acaso aquel pelinegro no sabía que Clorinde era solo de ella. La joven golpeó la mesa haciendo que todos la voltearan a ver, está se levantó para ir directamente a la mesa de los dos chicos.
—¿Que mierda crees que haces?
—¿A quien le hablas, rubia tonta? Respondió Wriot con burla al ver lo enojada que se encontraba Navia.
—A los dos, en especial a tí. La joven apunto al pelinegro con enojo este solo se rio haciendo que la rubia solo se enojara más.
—Solo abrazo a MÍ NOVIA. Navia sintió un dolor en el pecho al escuchar eso, pero su enojo le ganaba más que a su tristeza.
—¿Tú novia? Te aclaro pequeño gusano que Clorinde es mía y siempre será mía, es MÍ ESPOSA. La chica grito aquellas últimas palabras haciendo que todos en aquella cafetería se quedarán boquiabiertos por tal confesión.
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Pinkie Promise | Clorivia
Fanfiction-Tienes que jurar con pinkie promise... Se que no crees en eso, pero eso no cambia nada mientras yo lo crea tienes que cumplirlo. Clorinde se quedó mirando unos cuantos segundos el meñique de su amiga para luego repetir aquella acción -Yo Clorinde c...