CAPITULO 24

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En medio de la noche se encontraba un albino mayor escribiendo uno de sus diarios de laboratorio. Conocía perfectamente que los percances de estos últimos días afectaron significativamente sus avances pero tenía que admitir que era entretenido los sucesos de estos últimos meses.

bing~bing~bing

Aquel sonido arruino su lectura. Su cansada mano se posiciona en aquel teléfono para contestar la llamada que interrumpió su tranquilidad.

Gaster: hola?

Asgore: ¡¡¡Como que chara está en tu maldita casa!!!!

El grito fue tan fuerte que lastimó la audición de su oreja izquierda

Gaster: ¡¡¡¡No tengo a tu estúpida hija!!!!

Asgore: ¡¡Ahora mismo voy a tu casa con 20 patrullas!!

Gaster: si lo haces te juro que te voy a demandar!

Asgore: yo te voy a meter en prisión, ¡Quiero mi hija ahora!

El albino mayor cuelga el celular mientras sus dedos se posiciona en los pomulos de su rostro intentando tranquilizarce

Gaster: A este paso voy a buscar que Papyrus se case con Frisk

Aquel señor se levanta de su asiento y guarda su diario en un recipiente lleno de libros etiquetados cualitativamente de su investigación. Su mayor tesoro que nunca jamás tocará Sans, ya que siempre se planteó el albino mayor ser enterrado con sus libros.

Gaster: ¡Cinthia! ¿Ya llegó Sans?

Abrió la puerta con sus manos callosas y camino por su gran casa mientras se dirigía en el salón real. El cual se encontraba una rubia observando su típico programa.

Cinthia: no, aún no llegó y supuestamente red debería haberlo traído hace media hora.

Gaster: quien es red?

Cinthia: no lo sé peor llegó aquí de la nada. Pero es muy..... agradable, ademas es muy responsable con sus estudios. Me agrada más que chara.....

Gaster: hablando de esa tonta niña. ¿Donde esta?

Cinthia: se escapó, esa chica trae problemas hay que hacer algo para deshacernos de ella.

El albino con una sonrisa observa a la rubia delante suya.

Gaster: Nunca conci está faceta tuya. Me gusta...

Cinthia: no estoy de humor Gaster, esa mocosa trae problemas en casa y está corrompiendo a nuestro pequeño bebé

Gaster: no seas tonta, yo lo eduque muy bien.

Cinthia: lo suficiente para escaparse por 2 semanas.

El albino y la rubia comenzaron a reírse ante sus comentarios, en un movimiento lento pero firme, gaster se sienta alado de su ex esposa mientras su mirada se cruzan.

Gaster: sabes creo que fue mala idea dejar que la chica se quedara en nuestra casa, ahora vendra Asgore t nos montara tremendo problema!

Cinthia: Y como se entero?

Gaster: no tengo ni la menor idea.

Din dong

Sonaba el timbre correspondiente de la puerta, la rubia sin esperar la petición de gaster, se levanto del sillón negro y camino para abrir a la grande puerta café.

Cinthia: Pero mira nada más, 2 horas tarde....

Red: lo siento señorita, hubo pequeños percances... Pero traje a Sans sano y a salvo

Síndrome de EstocolmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora