Capítulo 6

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6. Las Disculpas.

Alessandro

Maldita resaca y eso que no bebí tanto anoche o eso creo ya ni me acuerdo bien, despierto todo adolorido por dormir en el piso, anoche la pase muy bien en la pijama, sentí que volví a mi época donde no tenía nada de qué preocuparme, volver a compartir así con mis hermanos me recargo la batería, la verdad extrañaba mucho a Alessandra ella siempre ha sido como mi otra mitad y cuando se fue a ese viaje la extrañe mucho pero entendí que ella necesitaba su espacio y que los dos tenias que aprender a estar sin el otro.

Cuando me desperté Axel y Alessandra seguían dormidos así que me levante con cuidado y me fui a mi habitación, al llegar me quede viendo un rato mi cama todavía tenía sueño y era domingo no tenía que trabajar pero no podía dormí tenia cosas que hacer así que me fui al baño a darme una ducha con agua fría para despertarme. Luego de ducharme y lavarme los dientes salí del baño con una toalla envuelta en la cintura y con la sorpresa de que mi gemela estaba sentada en mi cama esperándome.

-A ti mamá no te enseño que no se puede entrar a los cuartos sin permiso y si hubiera salido desnudo del baño- le digo mientras camino hacia mi almario a buscar lo que me voy a poner.

-Ay osito no seas tan dramático te conozco y sé que no vas a salir desnudo así que ya deja el drama y escucha lo que te vengo a decir- me dice y yo solo la miro y asiento para que continúe- Bueno tenía pensado que como hoy es domingo y no trabajas podíamos pasar el día juntos que te parece.

-Alessandra hoy tengo cosas que hacer y creo que voy a estar ocupado todo el día, porque no lo dejamos para otro día.

-Como, que cosas que hacer si hoy es domingo no la puedes hacer otro día. Que es más importante que pasar tiempo con tu gemela.

-Pues no es que sea más importante que tú, pero las quiero terminar para salir de eso.

-Bueno las terminas mañana, hoy vas a estar conmigo por fis osito tenemos un año que no pasamos tiempo juntos.

-Bueno está bien, como se que no me vas a dejar en paz acompáñame hacer lo que tengo que hacer y después que terminemos hacemos lo que tú quieras va- le digo y ella se levanto emocionada y me da un abrazo.

-AAA por eso te amo osito ya me voy alistar y nos vemos abajo para irnos- me dice ella emocionada enganchada a mi cuello.

-Yo también te amo osita ahora muévete, si bajo y no estás lista te dejo- le digo, ella suelta y sale de mi habitación dando brinquitos.

Luego que mi gemela se fue puede cambiarme tranquilo, opte por unos vaqueros y una camiseta blanca, me peine mi cabello y me puse mi lentes negros, agarre las llaves de mi auto, mi billetera y baje a desayunar. Cuando llegue al comedor me encontré a Axel ya desayunando todavía tenía puesta la pijama y estaba comiendo de su cereal favorito. Tome asiento y espere que mi nana me sirviera el desayuno, al rato bajo Alessandra lucía un hermoso vestido de flores que se ajustaba a su figura, el cabello lo lleva suelto y tenía un maquillaje suave pero bonito.

Cuando terminamos de desayunar nos fuimos hacer todas las diligencias que yo tenía que hacer terminamos en la tarde y Alessandra se le ocurrió ir a la cafetería donde me echaron el café tengo la impresión que ella y Axel tienen una obsesión por esa cafetería. Cuando llegamos ahí nos sentamos en la misma mesa de la otra vez y esperamos a que nos atendieran pero como no venia ninguna mesera Alessandra me obligo a que fuera a la caja a pedir los cafés así que me levante y me dirigí a la caja. Cuando llegue a la caja me encontré a la misma mesera que me había echado los cafés la otra vez no recordaba su nombre tampoco era que me importara como se llamaba. 

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⏰ Última actualización: Sep 11 ⏰

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Amargamente DulceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora