Capitulo 286-290

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Capítulo 286: Os enviaré al infierno juntos

—¿Yan Fu?

Zhuo Fan gritó.

Yan Fu era el alumno más preciado del Rey de la Píldora Sangrienta. Cuando consiguió que Yan Song trabajara para él, entre otras razones, también amenazó la vida de Yan Fu, lo que finalmente hizo que Yan Song cediera.

Era obvio lo mucho que el anciano Yan se preocupaba por el niño.

Así que, como buen administrador, Zhuo Fan buscaba la oportunidad de conseguir que Yan Fu también cambiara de bando y reuniera al maestro y al discípulo en una gran familia feliz. Sin embargo, esa oportunidad nunca se presentó, hasta ahora.

No era que estuviera abrumado por el trabajo, sino que no podía encontrar a Yan Fu. Tuvo suerte de toparse con él en la Ciudad Nube del Dragón, pero no había forma de que pudiera hablar con él frente a las siete casas, eso era seguro.

¿Quién hubiera imaginado que sería posible que los dos finalmente se reencontraran después de muchos, muchos años? Aunque las circunstancias tal vez fueran particularmente incómodas para explicar su salida.

Tampoco se trataba de que Huangpu Qingtian descubriera que lo robaría delante de sus narices. ¿Qué era un poco más de odio cuando no había amor entre ellos para empezar?

Solo que eso pondría a este tipo en el fuego cruzado y reduciría su vida a nada. Yan Song nunca lo perdonaría por esto.

Él nunca le debió nada a nadie, y lo mismo se aplicaba a todos.

Yan Fu encontró su pierna en las garras de Zhuo Fan, pero se dio cuenta de que el demonio no iba a matarlo. Miró con extrañeza y dejó de temblar, tratando de calmar también su corazón errante.

Aterrorizado por la posibilidad de que su provocación anterior le acarreara una muerte espantosa, se agachó para cubrirse en el instante en que Zhuo Fan aterrizó. Solo para oírlo querer divertirse a costa de las vidas de los demás, lo que provocó tal horror en su corazón que ni siquiera podía moverse.

Su única esperanza era que el demonio se fuera una vez que se hubiera saciado de matar.

¿Quién iba a saber que una vez que se asentara el polvo, el mismísimo demonio iría a por su cabeza? ¡Incluso encontró su escondite como si nada!

¡Le aterrorizaba!

Pero al darse cuenta de que Zhuo Fan no tenía intención de hacerle daño, se animó. Tal vez la muerte de su maestro también tuvo algo que ver. Yan Fu levantó la barbilla y le gritó a Zhuo Fan: "¡Humph, maldito demonio! ¡Juro vengarme por matar a mi maestro!"

—¿Y cómo exactamente? —Zhuo Fan levantó una ceja.

Con el ánimo decaído, Yan Fu rechinó los dientes humillado: "¡Sí, con mi poder nunca podré derrotarte! Y ahora estoy en tus garras. Mátame si tienes agallas. ¡Déjame ir a ver a mi maestro! No soy digno de vengarme, pero lo menos que puedo hacer es ir a servirle en el inframundo".

Zhuo Fan asintió por dentro.

[El niño es un cobarde y un libertino, pero es filial con su amo, eso se lo concedo. Puedo entender por qué el élder Yan lo adoraba.]

—No te preocupes, no te mataré. En cuanto a tu maestro... —Zhuo Fan estaba a punto de explicar, pero un ruido repentino lo interrumpió.

¡Zas!

Cuatro figuras aterrizaron a cien metros de Zhuo Fan, con Huangpu Qingtian a la cabeza. Las otras tres eran Yan Bangui, You Yushan y Lin Xuanfeng.

Los tres parecían serios, mientras que Huangpu Qingtian era el único que se lo tomaba con calma. Pero no había forma de ocultar el furioso deseo de batalla en sus ojos.

EL MAYORDOMO EMPERADOR DEMONÍACODonde viven las historias. Descúbrelo ahora