Ir de compras está dentro del top "10 cosas que me hacen feliz". Sí, lo sé. Puede parecer demasiado superficial, pero hay algo relajante en recorrer tiendas y tiendas hasta encontrar los accesorios, el maquillaje, el calzado o la ropa indicada. Casi siempre voy de compras con Ravenna, mi mejor amiga, y también con mamá; claro, cuando tiene tiempo.
A veces, como en esta ocasión, voy de compras sin compañía para pasar tiempo conmigo misma y meditar cosas mientras subo en las escaleras eléctricas de los establecimientos.
Hace una semana que iniciaron las clases y ya siento que todo el ciclo escolar se arruinó. Este es el año que se supone debo disfrutar más, es el último año de preparatoria; la Universidad hace guiño, guiño, desde lejos. Todavía no estoy preparada para eso.
Alejé esos pensamientos y continué caminando hacia la joyería, un par de aretes me harían sentir mejor.
Después de pasar lo que pareció una eternidad (al menos siento que para la dependienta que me atedió sí lo fue) y decidir qué par de aretes comprar (soy una indecisa de lo peor), me acomodé las gafas oscuras y me dirigí hacia una de las heladerías del centro comercial; tenía antojo de algo dulce y chocolatoso.
Antes de entrar a la heladería, por alguna razón que desconozco, mi cerebro decidió dar la orden de voltear a ver hacia un lado. Seguramente mi cerebro sabía cosas y sólo quería hacerme pasar un mal rato (yo tratando de justificar mis acciones). Me encontré con un par de ojos azules observándome a una distancia no muy larga. Ese par de ojos azules le pertenecían a uno de los responsables de haber arruinado el inicio de clases: Kian Linwood, el señorito perfecto. Cabello rubio ligeramente ondulado, cejas pobladas, una nariz perfecta y unos labios...
Decidí ignorarlo y entrar a la heladería. No sabía qué estaba haciendo allí y no quería saberlo. Ya suficiente tenía con lo insoportable que era compartir clases con él, y claro, con su hermana melliza, Kalyna.
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¡Holaaa por aquí! :)
Este ha sido el primer capítulo. No suelo escribir capítulos muy largos, pero como éste ha sido el primero, es mucho más corto de lo normal.
Cuéntenme, ¿qué les ha parecido?
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Quien pierde más ©
Storie d'amoreLos mellizos Kian y Kalyna se han cambiado de escuela. Pronto encontrarán una misión para divertirse: Hacerle la vida imposible a Noreen, la reina de su nuevo Instituto. Kian, tan perfecto como egocéntrico. Kalyna, hermosa y malvada. Noreen, en poca...