-Podria♡

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Alli estaba el increible y rudo Katsuki Bakugou llorando encerrado en su recamara, maldita sea.

Bakugou estaba acurrucado en un rincón de su habitación, abrazando sus rodillas con fuerza. Los sollozos sacudían su cuerpo convulsivamente a pesar de sus intentos por contenerse.

-Maldición... maldición...-repetía entre dientes como un mantra. Extrañaba a Kirishima más de lo que estaba dispuesto a admitir.

Lo había echado todo a perder. Su carácter explosivo e incapaz de comunicar sentimientos otra forma que no fuera agresividad, lo habían alejado de la única persona que podía comprenderlo.

Se arrepentía de cada insulto, cada rechazo. Sabía que su extraña forma de atraer la atención de Kirishima solo lo había lastimado. Pero en ese entonces era incapaz de aceptar sus verdaderos sentimientos.

Ahora ya nada podía enmendarse. Había bloqueado a Eijiro de su vida sin darle siquiera la oportunidad de explicarse.

Un sollozo más doloroso escapó de su garganta. Daría cualquier cosa por volver atrás y ser sincero con el pelirrojo. Pero lo había perdido para siempre.

Su corazón quedó completamente destrozado, al igual que el de Kirishima, por culpa de su estúpida terquedad para amar.

Pero ese no seria el fin, no seria el maldito y estupido fin.

Katsuki se frotó los ojos con rabia, odiándose a sí mismo por llorar como un imbécil. No podía rendirse tan fácilmente. Aún quedaba algo por hacer.

Bakugou encendió su celular con manos temblorosas. buscó el contacto de Deku y lo llamó, odiándose a sí mismo por tener que recurrir a él en este estado. Espero impaciente a que contestara, maldiciendo por lo bajo.

-Más te vale contestar maldito nerd... -murmuró entre dientes.

Cuando por fin escuchó que descolgaban, tomó aire para calmar el temblor de su voz.

-Oye Deku... necesito que me hagas un maldito favor -dijo con su tono autoritario de siempre, aunque menos enérgico-. Quiero hablar con Kirishima y- -Fue interrumpido-

-Ni lo pienses imbecil- Contesto Shoto del otro lado de la linea-Izu no va a hacer ni un favor por ti.

-Pero Sho- -No termino su frase y contubo un quejidos de sus labios para luego escucharse un 'Sh' por parte de Todoroki y el sonido de sus labios chocar-

El sonido de los besos de Deku y el maldito mitad-mitad hizo hervir la sangre de Bakugou. Pero debía controlarse, por Kirishima.

-Escucha maldita sea, es importante -dijo entre dientes, esforzándose por contener su ira-. Solo dale este mensaje a la roca parlante.

Del otro lado del teléfono se escuchó un suspiro resignado.

-Habla ya, no tengo toda la noche -gruñó Todoroki.

-Querras decir, no tenemos-Corriguio el pecoso-

Bakugou apretó los puños con rabia al escuchar las risitas de Deku y ese maldito mitad-mitad. Pero tomó aire para calmarse y dejó un mensaje breve pero claro:

-Dile a Kirishima que lo necesito. Que será mejor que se reúna conmigo mañana en el parque a las 5, si no quiere terminar todo entre nosotros para siempre.

Dicho esto, cortó la llamada de mala gana. Sabía que sonaba amenazante, pero no hallaba otra forma de expresarse. Solo esperaba que la roca parlante entendiera la seriedad de la situación y se presentara.

Mañana finalmente enfrentaría su destino. Dejaría de un lado su orgullo y se sinceraría como jamás lo había hecho. Le confesaría a Eijiro lo que verdaderamente sentía, aunque eso significara dejar su corazón vulnerable.

Jodidamente ٭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora