DCEG

❀Capítulo 03

❀ Justo lo que siempre quise... (Pone los ojos en blanco) ❀

Yuan Li, que aún no había pasado suficiente tiempo con sus padres, se encontró en el momento de partir hacia la Mansión del Príncipe Chu.

La comitiva de la Mansión del Príncipe Chu no podía esperar más. Cuando amaneció, un carruaje estaba listo frente a la Residencia del magistrado del condado; su carga consistía en una multitud de cofres de madera roja.

La familia Yuan, que no era de las que se aprovecharía de la generosidad de la Mansión del Príncipe Chu, preparó una cantidad igual de regalos para enviar de regreso, su comportamiento no era ni humilde ni altivo.

Cuando el carruaje se puso en marcha, Yuan Li levantó la cortina y miró a sus padres, que se despedían de él entre lágrimas. Reprimiendo la melancolía de su corazón, sonrió y les saludó con la mano.

Al ver su sonrisa despreocupada y radiante, que recordaba sus días de infancia, Chen Shi no pudo evitar dar unos pasos hacia adelante, "Li'er..."

Yuan Song la sujetó, reprimiendo el dolor de la separación, y saludó a Yuan Li.

"Adelante"

"Vete pronto, vuelve pronto. Tu padre espera el día en que regreses a casa triunfante".

El carruaje desapareció gradualmente en la distancia, hasta que las figuras de sus padres ya no fueron visibles, Yuan Li entonces bajó la cortina.

Dejó escapar un suave suspiro, pero rápidamente recuperó la compostura.

Ruyang estaba a solo cien millas de Luoyang y Yuan Li había sido independiente desde la infancia en su vida anterior. Si bien sentía una sensación de separación, no era abrumadora.

Su mente volvió a las cosas que su padre le había contado sobre la Mansión del Príncipe Chu.

El patriarca de la Mansión del Príncipe Chu era un confidente cercano del emperador fundador de la Dinastía Zhou del Norte, y había luchado junto a él durante el establecimiento de la dinastía. Después de la fundación de la Dinastía Zhou del Norte, el emperador otorgó títulos a cinco príncipes no reales, uno de los cuales era el Príncipe Chu.

Si bien la concesión inicial trajo consigo una gran alegría, con el paso del tiempo, el emperador Zhou del Norte se arrepintió cada vez más y vio a estos príncipes no reales como una espina en su costado. Por lo tanto, comenzó a idear formas de eliminarlos.

En éste momento, sólo quedaban dos príncipes no reales. Uno era el príncipe Chu, que había abandonado prudentemente su feudo y residía voluntariamente en la capital bajo la atenta mirada del emperador. El otro era el príncipe Chen, Chen Liu, que permaneció en su feudo, reuniendo tropas y ejerciendo un poder considerable.

Mientras que el príncipe Chen representaba una clara amenaza, el príncipe Chu, en cambio, se había ganado el favor del emperador. Esto era evidente en el hecho de que el hijo mayor del príncipe Chu, Chu Mingfeng, había ascendido al puesto de Gran Consejero a una edad temprana, antes incluso de cumplir los treinta años.

Era ampliamente conocido como el "Joven Gran Consejero ".

El príncipe Chu tenía dos hijos, ambos excepcionales en cuanto a talento y apariencia, capaces de ejercer el liderazgo militar y político. El hijo mayor, Chu Mingfeng, era con quien Yuan Li debía casarse para ahuyentar los malos espíritus.