Tan solo recuerdo esos días de dolor constante, era un hombre roto por dentro a pesar de toda la fortuna que me había tocado vivir, el crecer en una familia adinerada y poder tener una posición privilegiada y prestigiosa en mi trabajo eran algunas de las grandes suertes que me habían tocado vivir, cualquiera que me viera hubiera envidiado mi vida pero realmente no era tan perfecta como todos lo veían desde fuera, no fue cómodo empezar a lidiar con problemas desde que era un adolescente, el tener discusiones y una familia disfuncional hizo que mi personalidad no se desarrollara de una manera correcta y genero grandes vacíos emocionales en mi. No era un hombre que se notara roto o "mal" pero si supieran todas las cosas que hacía a espaldas los demás estarían asqueados, mi arte es muy distinto al de la mayoría, no era algo que me gustara mantener en secreto pero prefería ejecutarlo solo para después exhibirlo frente a todo el público.I'm desperately hungry for you [...]
Adoro cocinar, lo considero un arte verdaderamente bello que mezcla la belleza visual con una mucho mas intensa, una que puedes saborear y sentir dentro de ti, el vivir en una clase social alta me proporcionó la oportunidad de probar todo tipo de platillos en cada parte del mundo sin importar el coste, aprendí a saborear una buena carne pero ninguna se compara a la mía, la opinión sobre mi estilo de cocina es muy controversial, pocos si se podría decir saben la procedencia de mi exquisita carne y cada persona que lo digiere lo disfruta de forma natural, puedo notar con cada invitado que llega a mi comedor que mis platos son realmente apetecibles lo que me enorgullece enormemente. El matar por comida es algo que esta normalizado en este mundo pero por alguna razón que no logro entender no esta éticamente correcto el cazar al cazador, como psiquiatra tengo un interés inmenso por la complejidad de la mente humana, la doble moral de algunos y lo insignificantes que pueden llegar a ser, ratas en pequeños grupos que son fáciles de endulzar.
Vivo tranquilo con un ritmo lento, una rutina establecida que no fallaba y una ruta de casería perfectamente controlada que no dejaba nada que desear, tan vez un reportaje en las noticias a la semana siguiente pero se tomaría como un homicidio mas, una vida arrebatada que no importaba demasiado, tampoco era como que me esforzara por conseguir a alguien sumamente importante para la sociedad en la que vivía pero aun así...mi vida seguía siendo monótona, realmente me sentía cansado, aunque mi apariencia dijera todo lo contrario la mente me pesaba y no tenía un propósito de vida mas que seguir con el trabajo. Pero una tarde recibí una llamada que cambió completamente mi vida, al parecer uno de los investigadores de uno de los casos mas controversiales en el que el FBI trabajaba había comenzado a tener problemas y cambios de animo muy extraños y Jack necesitaba que tuviera a alguien con el cual repartir la carga de un trabajo tan pesado.
Al principio no sabía muy bien si aceptar ya que tenía la agenda algo llena pero no tenía nada que perder, me interesaba ver mis obras desde un punto de vista alterno al mío, me mando los datos del hombre con el que suponía tendría que tratar y acordamos la fecha de visita para el día siguiente. Recuerdo haberme levantado extrañamente temprano y darme mas vistas en el espejo que de costumbre, algo dentro mío me decía que debía estar mas perfecto de lo que ya era, llegue a las instalaciones del FBI y camine escoltado por dos guardias hasta una oficina de paredes de cristal, ahi fue donde te vi.
I promise I am kind
Uno de mis acompañantes abrió la puerta y ambos guardias se fueron a paso tranquilo, camine tranquilo hacia dentro de la oficina saludando en silencio a Jack, mi mirada se dirigió a ti como un rayo y empecé a examinarte, vi todos tus rasgos y me pareciste realmente familiar, un extraño sentir abrazo mi seca mente, pinté una sonrisa amable en mis labios y me senté en una silla a una distancia prudente tuya, el olor de tu aroma lograba llegar a mi nariz lo cual también examine con cautela, no fue hasta que te diste la vuelta que te percataste de mi presencia, el verte caminar hacia Jack murmurarle algo en el oído me hizo corroborar mis sospechas, no querías que estuviera ahi y claramente Jack me había llamado sin tu autorización.
-Es un gusto conocerte Will, soy Hannibal Lecter psiquiatra y terapeuta-indique extendiendo la mano-
Vi tu postura y rostro no muy felices de verme pero a la vez una leve niebla en tu mirada, de alguna manera generabas una sensación nueva en mi, podia escuchar la saliva recorriendo tu garganta y el tenue sonido de tu respiración bailando en una armonía casi perfecta, me percaté de que evitabas el contacto visual lo que me pareció interesante, se notaba por tu tono de voz tu cansancio pero no uno convencional, era una sensación de incomodidad y molestia la que resonaba con tus palabras poco cuidadosas, tal vez en alguna otra ocasión me hubiera incomodado mas pero contigo era distinto, eras casi como una ser nuevo de divisar en mis ojos.
Algo nuevo...
