|𝟑|

3.5K 273 39
                                    

Zara

Han pasado varias semanas ya desde que fui exiliada del área. Con suerte logré salir del laberinto en tres días pues jamás fui corredora, no sabía el camino por lo que me perdí varias veces, pero aprendí rápidamente a sobrevivir ahí dentro.

Pero antes de que sepas dónde estoy ahora, necesitas saber cómo fue que llegué hasta aquí..

Los últimos dos días pude oír a los corredores pasar, más me mantuve escondida. No quería que supieran que estaba sobreviviendo. Durante las noches tenía un lugar seguro para esconderme, un reducido espacio en el que un penitente no podría alcanzarme. Mientras tanto, durante el día aprovechaba para buscar una salida.

Gracias a un monitor que saqué de los órganos del penitente que había muerto la noche en la que entré pude salir por la puerta 4. No fue tan difícil como yo pensaba, pues al ir yo sola, hacía menos ruido que acompañada.

Mi instinto de supervivencia me impedía pensar en aquel día que salí del claro, pero de vez en cuando volvían los recuerdos a mi mente, de todo lo que viví con los chicos, eran como mi familia..

A su vez, mi orgullo me impedía recordar los momentos lindos, pues estaba llena de ira hacia ellos.. me sentía realmente traicionada de su parte. El simple hecho de pensar que yo arriesgaría mi vida por ellos y.. el hecho de que ellos no pudieran si quiera abogar por mi..

Que poca m..

Durante los tres días que estuve en el laberinto, mis sentidos se agudizaron. Aprendí rápidamente a distinguir que tan cerca o lejos se encontraban los penitentes en la noche, evitaba quedarme dormida para no ser encontrada por ellos, manteniéndome alerta. Aprendí a utilizar los pocos materiales a mi favor como defensa y distracción, tales como rocas y enredaderas.. pues no había más. Y el último factor.. al que realmente le debo la vida, fue aprender a caminar con sigilo, pues sabía que los penitentes se guiaban principalmente por el sonido o vibraciones en el suelo, por lo que muchas veces tuve que quitarme los zapatos para poder avanzar.

Finalmente, el último día me sentí aliviada al llegar a un túnel oscuro. Había una cerradura que exigía un código. Estuve aproximadamente unas 2 horas intentando acceder hasta que finalmente, obtuve el código correcto, abriendo así esta gran puerta.. dirigiéndome a unos largos pasillos con una luz en tonos verdosos.

Camine rápidamente buscando una salida, cuando finalmente encontré una puerta, no dudé en entrar cuidadosamente. Había entrado a un pequeño cubículo de cristal, todo era tan transparente y en unos tonos grises con azul y blanco.

Decidí darme la vuelta para salir nuevamente y buscar otra salida. Cuando una voz me detuvo.

—Felicidades Zara. Debo admitir que subestimé tus habilidades, pero has sido la primer persona en lograr salir con vida del laberinto.

Una voz neutra se escuchó tras de mí, gire levemente mi torso sin mover mi agarre de la barra metálica de la puerta, mientras observaba a una mujer adulta, de cabello oxigenado.

Hmm.. como Newt..

Flashback

—Buenos días Alby —saludé caminando por el claro.

—Buenos días Zara —devolvió mi saludo con una sonrisa leve.

La estancia en el área es agradable dentro de lo que cabe. Cada mañana al iniciar el día, saludaba a los chicos con una ligera sonrisa, pues quería que a pesar de las circunstancias pudiesen tener un agradable día, y esto parecía tener resultados positivos en ellos.

Tʜᴇ Mᴀᴢᴇ Rᴜɴɴᴇʀ: SᴜʀᴠɪᴠᴏʀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora