Era sábado, el sol apenas alumbraba la cancha en la que Cris estaba jugando, y el buzo que Mateo llevaba puesto parecía no ser suficiente para soportar el frío del día de hoy.
— ¿Que haces pelotudo?. — grito Cris por cuarta vez en un mismo tiempo.
Mateo había notado su mal humor desde que llegó con su hermano, Cris parecía no haberlo notado unos minutos después, que fue cuando Mateo encontró a Cris viendolo desde la distancia.
Definitivamente a Cris le estaba llendo mal hoy, se había caído como tres veces, le habían puesto una tarjeta amarilla y había anotado solo dos goles, lo que a él le parecía poco al parecer.
Mateo solo se encargaba de mirarlo mientras se acurrucaba en las gradas y comía unas gomitas mientras tomaba una botella de agua saborizada, disfrutando en cierta parte la tensión que se sentía en el ambiente.
— ¿Disfrutando el show que Cris arma?. — pregunto Franco mientras se ponía unos tenis y acomodaba sus medias.
— Algo así.
— ¿Que haces acá?, hace mucho que no te veo en la cancha. — empezó a sacar charla después de soltar una risa.
— Vine a acompañar a Bauti. — hablo secamente, no tenía nada en contra de Franco pero en ese momento estaba rompiendo su tranquilidad.
— ¿Si?, bueno venís al pedo porque tú hermano se está muriendo de hambre hoy.
Mateo rio mientras lo volteaba a ver y negaba divertido.
— Estaba durmiendo la siesta, tiene sueño. — lo excuso.
— Si, igualmente tampoco juega tan bien cuando no tiene sueño, el único que zafa acá soy yo.
— Si vos decís. — sonrió burlonamente mientras tomaba un poco de su agua.
— ¿No me crees?¿El mejor para vos es Cristiano, no?.
— Si, además su papá es Cristiano Ronaldo, lo futbolista viene de genética.
— Si bueno, no todos tienen la suerte de ser hijo de unos de los jugadores más famosos de fútbol. — se quedó en silencio un rato mientras miraba a Mateo, como el viento hacia que su pelo que ya estaba algo largo le tapara parte de su frente, puso un mechón tras su oreja antes de seguir hablando— ¿Si fuera hijo de Messi sería tu favorito?.
Mateo se quedó inmovil en su lugar, no sabía si por el contacto que había tenido con Franco o por la pregunta, que pareció un poco desanimado al hacerlo. Se enderezó en su lugar para mirar mejor a Franco antes de responder.
— No es eso, no importa si sos hijo de un futbolista o no, Cris tuvo suerte, el ya es reconocido por su papá, pero hay gente que es aún más buena que Cris y no son reconocidos.
— ¿Osea Cristiano es tu favorito o no?.
— No.
Franco sonrió mostrando su dentadura perfecta y dejando a la vista sus hoyuelos, sus ojos tenían un brillo.
— Mejor, voy a ser tu favorito, ya vas a ver.
— ¿Seguimos hablando de fútbol o...?
Los dos rieron, pero fueron interrumpidos por un grito.
— ¿¡Vos sos pajero o te haces!?. — grito Cris en el suelo, al lado suyo había un chico que si Mateo no mal recuerda se llamaba Mario Monzón.
El rubio se levantó de su lugar y su mueca divertida se convirtió en una de preocupación al ver como Cris se abalanzaba contra Mario, golpeandolo en el pómulo.
Rápidamente Mateo bajo hasta la cancha para acercarse a Cris, pero antes de que pudiera seguir acercándose Bautista se puso en frente de el, indicándole con la mirada que no se acerque más de lo suficiente.
Mateo obviamente obedeció, no es como si se iba a interponer y le iba a decir a Cris que lo mire a los ojos y que ese no era el.
Siguió con la vista a Cris, parecía un animal salvaje esperando para atacar a su presa, aunque el entrenador evitaba que se tire encima de Mario.
Le dieron tarjeta roja y lo mandaron al banco, Mario tuvo que ir a la enfermería de ese lugar para que le limpien el golpe o algo así.
Junior camino furioso hacia el banco mientras murmuraba cosas intendibles, Mateo corrio detrás de el después de que Bautista le dijera que tuviera cuidado, como si Cris fuera un hombre lobo en luna llena.
Busco su agua y sus gomitas antes de sentarse al lado de Cris, aunque antes tuvo que buscar otro paquete de gomitas en la mochila de Bauti.
— ¿Te alcanzo a pegar?. — pregunto después de tragar.
— No. — suspiro el morocho mientras se estiraba.
El menor noto que estaba tratando de liberar la gran tensión que sentía en su cuerpo así que trato de ayudarlo, acomodándose mejor al lado de Cris para poder empezar a acariciar la mejilla del mismo con suavidad, Cris al instante cerró su ojos, disfrutando del tacto.
Así siguieron algunos pocos minutos más, Cris en ningún momento abrio los ojos.
— ¿Te sentís mejor?. — pregunto Ramírez con calma, al ver el asentimiento del mayor intento sacar su mano de la mejilla de este, pero Cris la volvió a poner en donde estaba antes de que la saqué del todo.
Mateo sonrió, sintiéndose orgulloso de que pudo hacer relajar a Cris, hacer que el se sienta bien.
— ¿Lo estoy haciendo bien?. — pregunto emocionado removiendose un poco en su lugar.
— Si Mateo, seguí así. — hablo en un suspiro Cris mientras disfrutaba del suave tacto.
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Creo que el siguiente cap va a ser más intenso MUAJAJJA.
¿Si hago una historia donde a Gally le gusta joder con el novio de Minho y Minho es un loco posesivo?
