Capítulo 4: Traición

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Agotada, la pelinaranja se arrastró hacia su cama, en la cual cayó mientras soltaba siseos de dolor, pues algunas heridas de la pelea aún le dolian, y mucho. Pese al dolor, la pelinaranja buscó la posición más cómoda posible para poder dormir, pero sus costados dolían indescriptiblemente lo que en consecuencia le sacó un par de lágrimas, de las cuales se deshizo respirando profundamente hasta quedar dormida.

Mientras dormía tranquilamente, la luz se encendió. Lo primero que Yoohyeon hizo fue quejarse por la interrupción de su sueño, pues dormir era uno de los mejores momentos de su vida y realmente odiaba cuando alguien la interrumpía.

—Yo te advertí que por un rato estabas libre.

La pelinaranja volvío a esconderse bajo las sabanas para evitar que la luz le moleste tanto como lo hacia, ella necesitaba todas las luces apagadas para poder dormir. Parecía que la pelinaranja había ganado la batalla, al menos hasta que su padre lanzó un fuerte ataque de viento, haciendo que Yoohyeon caiga en el suelo y que una de sus zonas heridas amortiguara el golpe, haciendo que suelte un quejido.

—Ay no te quejes, yo a tu edad vivía cosas peores que un entrenamiento sorpresa y no me quejaba —Lo único que deseaba la pelinaranja era envolverse en las sábanas y llorar hasta quedarse dormida otra vez.

Lentamente, la pelinaranja comenzó a levantarse del suelo, sin embargo iba muy lento para el gusto de su padre, quien terminó de levantarla con uno de sus potentes hechizos de viento.

Furiosa y estresada, la pelinaranja contraatacó con una muy potente bola de fuego acompañada de un puñetazo justo en la cara de su progenitor, logrando así darle a Yoohyeon suficiente tiempo para despertarse y concentrarse.

—Espero y uses ese truquito más seguido Yooh.

—Sabes perfectamente que no tienes derecho a llamarme así—Yoohyeon miraba a su padre con furia, pues odiaba que su padre le pusiera apodos.

—Algún día entenderás porque somos tan duros contigo.

—¿Eso era todo? Gracias por otra noche de insomnio, ahora largo— Aquel hombre iba a seguir hablando, pero se dio cuenta de que Yoohyeon no lo escucharía así que dejó la habitación.

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2 meses habían pasado de aquella noche tan rutinaria pero a su vez tan extraña para la pelinaranja, pues fue inesperado que su padre se ablandara de la nada con ella, pero decidió simplemente aprovecharlo y no buscar una explicación para eso, al menos por el momento.

Ahora se encontraba en clase de criaturas mágicas viendo temas algo aburridos para su gusto, pues el como cuidarse de criaturas no era tan interesante como las épicas batallas generadas por conflictos antiguos.

—Bien alumnos, para la próxima semana deberán preparar una exposición oral con el compañero que tengan atrás —Todos los estudiantes se voltearon de inmediato para ver con quién debían realizar el trabajo.

—Oh, aparentemente nos tocará trabajar juntas—Pese a no demostrarlo, la pelinegra estaba realmente emocionada, al fin podría saber algo más de esa chica en la que siempre se fija su atención.

La campana sonó, dando a entender que  el receso había comenzado, pero Minji no iba a irse hasta no conseguir el número de aquella hermosa pelinaranja, pues ahora tenía la excusa perfecta.

—Oye Yoohyeon, v-voy a necesitar que me des tu número, así podemos concordar un día para comenzar con el trabajo.

—No es necesario, lo haremos hoy en la biblioteca después de entrenar —La mirada indiferente de la pelinaranja era suficiente para darle a entender a Minji que no estaba muy entusiasmada con la idea de hacer un trabajo junto a quien prácticamente era su acosadora.

New Way Out//Jiyoo FanficWhere stories live. Discover now