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El rey despertó más temprano de lo acostumbrado,se mantuvo acostado en su cama,pensando en las palabras de su hija y heredera le había dicho por la noche. Con mucha dificultad,se reincorporó en la cama,manteniéndose sentado,llamó a sus guardias,dando una órden directa.

Daena dio un bostezo que cubrió con la palma de su mano,alejó los brazos de Daemon de su cintura con cuidado de no despertarlo y puso sobre su desnudez un camisón,que sintió frío sobre su piel caliente. La puerta de la habitación fue tocada,por lo que Daena pronto fue a ver,encontrándose con una de las doncellas de la reina.

-Mi señora,el rey ha solicitado su presencia en los aposentos reales-habló,sin alejar la mirada del piso.

-¿Solo yo?

La joven asintió y caminó luego de hacer una reverencia,la Targaryen cerró la puerta y se dio la vuelta,dispuesta a vestirse. Dejó a Daemon y Rhaenyra profundamente dormidos en cada lado de la cama.

Daena se encontró caminó a los aposentos del rey al mismo tiempo que Ser Otto Hightower,el cuál no dudo en caminar junto a la princesa. Los aposentos fueron abiertos de par en par y Daena reconoció a los hombres del consejo rodear la cama del rey,por lo que pronto se acercó.

-Buen día,padre-saludo,tomándolo por una mano y dándole una suave caricia.

-Buen día,mi niña-saludo el rey con una sonrisa mientras le daba un sorbo a su té-Sé que se están preguntando que hacen aquí a primera hora del día.

Daena miró a los hombres que la observaban,cada uno preguntándose,¿qué hacía ella ahí?

-Cómo bien saben,hoy se abrirá una disputa por la herencia de mi nieto,Lucerys Velaryon. Y durante varias horas,he pensado que no hay persona más competente para tomar una decisión,que mi hija,la princesa Daena.

Daena miró al rey,incrédula ante sus palabras,sin embargo,no objeto,miró a los hombres del consejo,encontrándose con una que la veía con desagrado,la de la Mano.

-Mi rey...

-No aceptaré objeción alguna,esta decisión ya ha sido tomada.

-Me temo que la princesa no puede interferir con los asuntos de la corona,mucho menos...

-Calla Otto-el rey lo miró-Daena es parte de mi corte,lleva mi sangre y ha gobernado un reino por más de veinte años,no hay mejor persona que ella para una situación como está.

-Se lo agradezco,mi rey-Daena besó la frente de su padre,sin soltar su mano.

-Es todo,mis lores.

Los hombres del consejo dieron una lenta reverencia,para después salir de los aposentos.

-Debo ir a prepararme,padre-habló Daena-vendré a verte más tarde.

-Por supuesto-el rey asintió,soltando por fin la mano de Daena.

Daena salió de los aposentos y se dirigió a los suyos,pensando en lo que acababa de suceder. Abrió la puerta y entró,encontrándose con la cama vacía,supuso que Daemon y Rhaenyra se encontraban ocupados,por lo qué Daena pidió que su baño fuera preparado lo antes posible.

Al estar sola,se desnudó libremente y entró en la bañera de agua hirviendo,sintiendo que todos sus músculos se relajaban. Daena despertó,sintiéndose desorientada,el agua de la bañera ahora estaba tibia,por lo que ella salió de inmediato, encontrándose con su ropa sobre la cama.

Se vistió,dio varias caricias a su vientre antes de tomar asiento y peinar su cabello,se miró en el espejo unos segundos antes de ir hacia la puerta e intentar abrirla,fracasando de inmediato.

FOR LOVE //Daemon T. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora