Después de la tormenta viene el silencio

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Finalmente la guerra se había terminado, una guerra que en ocho meses se había cobrado la vida de miles de personas, tanto soldados como civiles siete meses después esa época aun parecía que hubiese sucedido ayer dejando estragos en la vida normal del país Tristain, no obstante pese a que económicamente se sentian las consecuencias de la guerra poco a poco bajo el mando de la reina Henrietta se estaba recuperando.

Frente a la estatua que se erguia orgullosa en medio de la capital en memoria de la misteriosa diosa relámpago que acabó con la guerra estaba encapuchada con dos coletas al lado de su cabeza una chica que como cada día y muchas personas había dejado unas flores al pie de la estatua.

La expresión bajo  la capucha era de dolor y tristeza eran poco notorias ya que mantenía la cabeza gacha.

- One-sama...

Susurro con dolor aún vivaz, fue entonces que sacó del bolsillo de su falda un extraño control remoto el cual tenia un único botón, botón que al ser presionado la llevaría de vuelta a su mundo una vez que encontrase a Misaka Mikoto.

- Pero como puedo regresar si tu ya no estas aquí...

Solto esas amargas palabras, hace siete meses que había llegado a este extraño mundo paralelo  en el que había sido arrojada la Railgun solo para en la versión oficial la chica había desaparecido, no contenta con esa respuesta decidió hacer uso de fuerza e interrogar a algunos funcionarios de gobierno solo para saber que realmente había muerto.

Después de que los niveles 5 de una u otra manera le ayudaran e incluso el chico que tantas veces llamó simio a activar el portal que la traería hasta aquí  para simplemente descubrir que había dado su vida no era algo para lo que estaba preparada, las campanas resonaron en ese momento anunciando el inicio del medio día, por lo que respirando profundamente y cerrando los ojos para controlar sus lagrimas que amenazaban con salir guardó el control de nuevo en su bolsillo.

Después de todo Shirai Kuroko aun tenia una última cosa que hacer antes de regresar a Ciudad Academia con la cola entre las patas, una importante ceremonia se llevaría a cabo ese día y por supuesto que antes de que diece inicio debía hablar con la protagonista de dicha ceremonia, una cierta chica de pelo rosa con la que según la poca información que pudo entender había formado un fuerte vínculo con su One-sama.

Teletransportandose en el aire comenzó con su último viaje en este mundo para saber la verdad.

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Frente a una ventana ya con su vestido de novia puesto Louise Françoise le Blanc de la Vallière veía con melancolia el paisaje  mientras era maquillada por las múltiples sirvientas a su disposición, gracias a que últimamente se había vuelto mas perspicaz con ayuda de magia pudo escuchar a lo lejos como los guardias eran abatidos silenciosamente.

- Finalmente me encontraste.

- ¿Dijo algo señorita Vallière?

Siesta le preguntó al no alcanzar a entender la declaración de la pelirrosa.

- No te preocupes Sietsa, por favor dame un minuto a solas, llevate a todas las demás, yo les indicaré cuando puedan  entrar.

Extrañada por la razón de su petición Siesta obedeció, justo cuando había cerrado la puerta tras de si luego de una breve brisa una chica encapuchada apareció detrás de ella.

- Tu eres ¿Louise Françoise le Blanc de la Vallière?

Tras siete meses en Halkeginia y algo de conocimiento sobre francés antiguo Kuroko había aprendido a hablar el idioma, claro no con tanta maestría pero lo suficiente.

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⏰ Última actualización: Sep 17 ⏰

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Zero No Tsukaima: Railgun No Rondo lllDonde viven las historias. Descúbrelo ahora