Un problema elevado al cubo (TMNT Yaoi)

Capítulo 2

POV Leonardo

Una descarga eléctrica recorre mi cuerpo hasta llegar a mi cerebro. Las piernas me fallan, haciéndome caer al suelo, y todo se oscurece. Por un momento pensé que iba a morir, pero eso no habría tenido sentido. Si hubiera sido una máquina hecha para matar, no le habrían apuntado a uno de los suyos en semejante situación, además, ese Krang parecía emocionado al recibir el disparo. Siento como si me estuvieran arrancando una parte de mí, de hecho, tres para ser precisos. ¿Tendrá algún significado este número?

Me envuelvo la cabeza entre las manos y cierro los ojos con fuerza, entonces, una explosión. La máquina se hace pedazos, el rayo que me aprisionaba se detiene y todo parece volver a la calma. Por fin puedo volver a respirar con normalidad, mi mente está despejada y ya no siento ningún dolor. Tal vez logramos detener el proceso antes de que se completara. Por suerte, esta vez había temido lo peor.

En este momento tengo que mirar rápidamente a mi alrededor para averiguar qué está pasando. La mayoría de los Krangs están destruidos y la máquina es ahora inutilizable, también veo que Raph y Mickey han conseguido abrirse paso hasta el exterior. Diría que la misión puede considerarse completada por esta noche. Le hago un gesto con la cabeza a Donnie y empezamos a subir de nuevo al tejado.

Nos alejamos rápidamente del edificio ahora en ruinas y en cuanto estamos en una zona segura nos detenemos a descansar. Apoyo las manos en las rodillas y bajo la cabeza. El rayo que me ha alcanzado no parece haberme causado ninguna herida, pero temo que, a pesar de todo, haya tenido algún efecto sobre mí. Me siento desorientado y exhausto por el cansancio. En cuanto llegamos a la guarida tengo que pedir la opinión de Donnie: "Buen trabajo equipo, pero la próxima vez que ordene una retirada será mejor que me hagáis caso de inmediato, corríamos peligro de quedarnos atrapados ahí dentro"

Levanto la cabeza dispuesto a recibir sus quejas, pero en lugar de eso me encuentro con caras de asombro. Todos miran en mi dirección como si hubieran visto un fantasma: "¿Qué os pasa? ¿Tengo algo en la cara?"

Donnie se lleva una mano a la cabeza, como si estuviera ante una ecuación que no es capaz de resolver: "Pero esto es imposible"

Raph, en cambio, está como paralizado, pero no como cuando ve una cucaracha, más que asustado, yo diría que parece preocupado: "Por favor, díganme que esto es una pesadilla"

Mickey también tiene los ojos muy abiertos por el asombro. Levanta indeciso una mano y señala en mi dirección: "Mira detrás de ti"

Si se han puesto otra vez en mi contra para gastarme una broma, esta vez se están pasando de la raya, empiezan a preocuparme. Casi espero que realmente se les haya ocurrido un estúpido chiste y que no haya nada en esta azotea con nosotros. Me giro lentamente y me preparo por si tenemos que volver a pelear, pero en lugar de eso, me encuentro yo también con la boca abierta. Parpadeo varias veces, pensando que sea sólo una alucinación, pero aquellas figuras siguen delante de mis ojos. Una de ellas saluda alegremente con la mano y nos sonríe: "Hola chicos"

Tres tortugas. Todas vestidas como ninjas y armadas con un par de katanas, con ojos azules y un pañuelo azul. ¡Todas exactamente iguales a mí! Es como si estuviera mirando mi reflejo en tres espejos al mismo tiempo, aunque en realidad no me parecen exactamente iguales, cada una tiene algo diferente. El del centro da un paso adelante con las manos en alto. Tiene una expresión seria y decidida, parece querer tomar la palabra, como si fuera el líder de este anómalo grupo: "Su confusión es comprensible, pero no tiene por qué temernos"

Cuando establezco contacto visual con la otra tortuga a su derecha, esta se frota el brazo nerviosamente. Parece más inseguro que los demás, pero por su voz estoy cierto de que es sincero: "Fuimos creados por la invención de los Krang, pero os aseguro que no os haremos daño. Somos como vosotros, queremos ayudaros"

La última tortuga de la izquierda es la que nos había saludado antes. Parece encantada de vernos y se acerca sin dudarlo: "Así es, las misiones serán pan comido ahora que casi hemos doblado en número. ¡Más tortugas es igual a más diversión!"

Espera, ¿para eso era esa máquina? ¿Para crear clones? Así que esa sensación que tuve fue porque estaban creando otros yo, pero si ese es realmente el caso, deben haber necesitado una base para originarlos. No pudieron surgir de la nada, pero ¿qué obtuvieron de mí?

"Debe de haber muchas preguntas para las que buscas una explicación ahora mismo, pero estoy seguro de que Donatello podrá ayudarnos"

El clon del centro parece imparcial, pero metódico. Mientras a mí me abruman las emociones y las dudas, él ha pensado de inmediato en cuál debe ser nuestro siguiente movimiento.

"Sin embargo, si no confías en nosotros para llevarnos al refugio, podemos esperar aquí fuera mientras decides. No queremos causarte problemas"

El segundo, en cambio, es más sensible. Su voz no es tan firme, pero parece haber entendido lo que me asusta en este momento. Si son exactamente como yo no representan un peligro, pero si existiera la más mínima posibilidad de que lo sean, tengo que asegurarme de no poner en peligro a mi familia.

"Vamos chicos, basta de caras serias, estamos todos en el mismo equipo. Dejemos que el científico haga sus comprobaciones y relajémonos"

El último es el único que no está preocupado, este examen parece ser sólo una formalidad a su parecer. De hecho, a primera vista no pensaría que están bajo el control de los Krang. Ciertamente no es normal que haya cuatro yo, pero tal vez lo estoy exagerando demasiado. Si fuimos capaces de revertir el intercambio mental entre Raph y un Krang, entonces también podremos encontrar una solución a esto.

Me vuelvo hacia mis hermanos para ver sus reacciones y intentar averiguar qué piensan de la situación. La curiosidad de Mickey va en aumento, sobre todo por el clon de la izquierda, lo que no me sorprende en absoluto. Donnie está muy concentrado, parece que ya se ha puesto manos a la obra para intentar averiguar qué ha pasado. Raph, en cambio, está indeciso. Apuesto a que no le gusta para nada la idea de tener a cuatro Leonardo rondando por las alcantarillas.

Evaluando rápidamente la situación, creo que no tengo otra opción sobre qué hacer: "Llevémoslos con nosotros. Donnie, en cuanto lleguemos a la guarida, tendrás que hacernos un chequeo completo a los cuatro y luego empezaremos a examinar todo el material disponible en el database de los Krang sobre esa máquina"