un diario de un raro Slytherin --> Cedric x T/N <--

Encañonado...

PoV: Narrador

_Había muerte por todas partes, varios estaban empezando a cansarse y a caer de uno en uno, mientras que otros aún tenían el suficiente coraje y la fuerza para acabar con unos cuantos mortífagos más._

_Tal era el caso de T/N y Alek, lanzando hechizos por aquí y por allá, protegiendo a todos los estudiantes que podían (sobre todo a los de primer año) pero de pronto Alek logró divisar un rostro conocido de entre los demás, ese asqueroso Hufflepuff que tanto odiaba, frente a él estaba nada más y nada menos que Cedric Diggory. Rápidamente se acercó a él para enfrentarse cara a cara con el propósito de hacer justicia a su amiga que tanto había sufrido por ese estúpido ser humano._

_Por supuesto que Diggory tuvo una reacción al ver a Alek acercarse tan rápidamente y esa fué lanzarle un encantamiento aturdidor que sorprendentemente fué esquivado por el pelinegro a pesar de no ser tan bueno en duelo. Diggory retrocedió y Alek solo estaba cada vez más cerca de él, fué ahí cuando T/N se percató de la ausencia de su mejor amigo. Algo alterada volteó a todos lados con la esperanza de encontrar al pelinegro, lo cuál logró rápidamente._

_Corrió hacia él inmediatamente al darse cuenta de con quién pretendía enfrentarse. Mientras tanto Alek ya había herido levemente al castaño, atandolo con el hechizo Incarcero, seguido de el encantamiento Rictusempra, al parecer el enojo le funcionaba bastante bien._

_— ¡¿Pero que demonios estás haciendo?! — Dijo T/N cuándo estuvo al lado de su mejor amigo, tomándolo por los hombros y sacudiendolo un poco._

_— ¿Que no es obvio? Voy a romperle la cara a este idiota y lo mataré también si es necesario... — Responder Alek inmediatamente, soltándose del agarre de su amiga y apuntando su varita una vez más hacia Diggory._

_T/N lo detuvo..._

_— No, no lo harás._

_— ¿Que?... ¿Que demonios estás diciendo?_

_— Que no lo harás... No sin mí. — T/N esbozó una sonrisa y dirigió su mirada al castaño frente a ellos — Vamos a matar a este imbécil de una vez por todas._

_Sin dudarlo, Alek se unió a su amiga, sonriendo de la misma forma que ella. Después de bastante tiempo se habían sentido bastante vivos al recordar aquellos días en el club de duelo de Hogwarts, cuando ambos se divertían y jugaban... Cuando eran felices._