¡no es mi alfa! 𐙚 heejake

12.

—¿Qué se supone que está haciendo? — preguntó Ni-Ki al ver a Gyuvin escalar la cascada—. Trae puesto mis calzones.

—Ay Dios mío— la cara de desagrado en Heeseung era evidente, ver a su hermano exhibiendo su cuerpo y usando la ropa de Ni-Ki no era algo que quisiera admirar.

—¿Cuánto a que cae de panza? — dijo Ni-Ki al alfa a su lado. El mayor lanzó una risa y asintió cerrando una pequeña puesta con él.

—¡Gyuvin, si caes de panza te regresas a Seúl! — gritó para que su hermano pudiera escucharlo.

—¡No voy a caer! — gritó tratando de mirar hacía ellos, justo en ese instante su cuerpo se tambaleó un poco y terminó resbalando, logrando caer desde la parte alta de la cascada hasta impactar contra el agua fuertemente.

—¡Uh! — se quejó Ni-Ki al ver la manera tan fea en la que Gyuvin había caído. —Bueno, no cayó de panza.

Heeseung soltó una risa completamente satisfecho por toda la situación, durante las siguientes horas los dos niños se la pasaron jugando fuera de la cascada, puesto que Ni-Ki no podía nadar en ella. Mientras tanto Gyuvin se tomó la tarea de pedirle disculpas a Jake por haber tomado la ropa interior de uno de sus hijos, por supuesto, recibiendo regaños de parte del omega.

Sin embargo, hubo un momento en que Gyuvin tomó la iniciativa para poder entablar una conversación con Jungwon y así hacer que Heeseung fuera directamente por el omega.
Le agradaba Jake, lo que no le agradaba era ver como aquel omega se lastimaba a sí mismo con ayudar en algo como eso al mayor.

—¿Por qué nunca me dijiste que detrás de una bata de hospital se escondía un excelente Shim Jake? — dijo el alfa sentándose a su lado.

—¿Quieres callarte? No sé si tomar eso como un halago. — dijo evitando mirar al alfa, Heeseung soltó una risita y negó rápidamente.

—Jungwon realmente está encantado con esta familia, dice que le parece divertida la manera en la que manejamos las cosas como ex esposos. — sonrió mirando al omega a su lado.

—No puedo creer que ese pobre chico esté cayendo en tu mentira, sabes, el día en que él se de cuenta no quiero que vengas a mi llorando. — le regañó con sutileza. El alfa no pudo evitar sentirse encantado con la manera en la que Jake siempre lo regañaba. Era como estar viendo a un pequeño perro gruñirle.

—Está bien, Jake, pero eso no pasará y entonces podré agradecerte todos los días de mi vida por haberme ayudado con esta mentira— le respondió por último, antes de levantarse de su lugar para ir de nuevo con el omega castaño.

El menor suspiró viendo a aquel alfa alejarse cada vez más de él, a veces le hubiera gustado miles de veces haberse confesado desde antes, pero fue algo que no pudo hacer por orgullo, se guardó sus palabras y sus sentimientos sólo para él. Porque en primer lugar no deseaba involucrarse con un alfa que ya tenía pareja, y en segundo, porque entendió que sería imposible que Heeseung se fijara en él teniendo a Jungwon.

Cuando se graduaron, jamás creyó que se encontraría con aquel alfa de nuevo, trabajando juntos en una veterinaria y siendo compañeros de trabajo por muchos años. Llegó a conocer todo de él y Heeseung conoció a sus más grandes tesoros.

Ahora solamente le quedaba mirar como aquel alfa era feliz tratando de enamorar a otro omega.

Sonrió alegre al verlo, al menos se sentía feliz por Heeseung, porque después de haber pasado por un mal momento en una relación, por fin estaba abriendo su corazón para encontrar a alguien más.

—¡Papi!, ¡Papi! — el grito de Ni-Ki lo sacó de sus pensamientos y le prestó atención.

—¿Qué sucede, cielo?

—¡Heeseung hyung dijo que hoy nos llevaría a cenar!, ¡A todos! — gritó de la emoción aquel pequeño niño, Jake sonrió complacido. —¡Y también dijo que me enseñaría a nadar!

—¡¿En serio?! — exclamó emocionado para su hijo. —Eso es genial KiKi, seguramente aprenderás rápido.

—¡Sí!, ¡Y así podré nadar con delfines! — gritó una vez más dando pequeños aplausos. —Sabes, Seungie hyung cumple mejor sus promesas que nuestro propio papi, debiste haberte enamorado de él.

—¿Para qué?, ¿Para qué Maki tuviera un crush con su propio padre? — se quejó divertido.

—¡Papá! Yo no tengo un crush con Heeseung hyung, es sólo que, es complicado. — el mayor se quejó cruzándose de brazos y haciendo un leve puchero.

—Está bien, te creó— rio bajito. —Ahora Maki ve a cambiarte para que podamos irnos al hotel— dijo cargando entre sus brazos a su hijo menor. —Y tu te bañaras al llegar al hotel, hueles muy mal Ni-Ki.

El menor soltó unas risitas traviesas mientras se aferraba al cuello de su padre. Jake comprendió que al menos se sentía feliz teniendo a sus hijos y que por ahora eso era todo lo que importaba.

Después de todo estaban en un hotel en Hawái, a miles de kilómetros de Seúl, debía disfrutarlo mejor que nunca. ¿Quién más podría estar ahí para complicar su situación? No es como si el verdadero ex esposo de Heeseung fuera a aparecer.