En un valle de sombras,
donde la luz no penetra,
hay una ciudad que yace,
en un mar de cenizas.Sus calles están vacías,
sus casas están derruidas,
sus ventanas están rotas,
y sus puertas están cerradas.El viento sopla fuerte,
y lleva consigo,
el olor a muerte,
y el sabor a desespero.La gente camina sola,
con la cabeza baja,
sin mirar al cielo,
ni sonreír a la vida.Sus rostros están marcados,
por el dolor y la tristeza,
sus ojos están vacíos,
y sus corazones están muertos.La ciudad está maldita,
por la mano del destino,
y su gente está condenada,
a vivir en este infierno.No hay esperanza aquí,
no hay futuro ni pasado,
solo hay un presente,
que es un eterno dolor.La ciudad de cenizas,
es un lugar sin alma,
donde la vida no existe,
y la muerte es la reina.Sus calles están llenas,
de basura y desechos,
sus parques están secos,
y sus ríos están contaminados.La gente vive en la miseria,
en la pobreza y la desesperación,
sin nadie que los ayude,
ni nadie que los escuche.La ciudad de cenizas,
es un lugar sin Dios,
donde la fe no existe