Croissants

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- Wow Kenma nunca creí que me invitarias a Dulce de limón a pasar el rato...

- no te acostumbres, sólo lo hice porque hoy hay ofertas en el pastel de chocolate. No puedo desperdiciar tal oportunidad, es como...un videojuego que quizás nunca jugaré pero lo están regalando.

Para Yaku la verdad no le impresionó la respuesta de Kenma. Sabía perfectamente que le gustaba ese pastel de chocolate y que no iba a perder ninguna oportunidad de oferta, sabiendo que Kenma nunca saldría de su cueva oscura para jugar videojuegos...a no ser que Hinata lo obligará a salir o esos descuentos. Pero no le importó mucho, entendía a Kenma, los pasteles de todo tipo en esa cafetería eran brutales y si estaban con descuento no había que desaprovechar ¿No?.

No tardaron mucho en entrar, todo era como siempre, pero más espacioso, pero muy revoltoso a la vez, nada más porque al entrar se encontraba con...parejas. y si, Kenma le habia contado de tal maldición de la cafeteria. Y no, no era tal maldición del aviso del conejo feo dibujado por el dueño del local, esa es otra historia. Más que nada por la maldición de que cada persona que entre encuentra pareja...y eso, ah, ojalá le pasará, pero es difícil. Uno: su estatura es un problema, más para las chicas que prefieren altos. Número dos: es bajo. Tres: ES BAJO. Pero eso no quería decir que perdiera la esperanza, le gustaba como es, solo que las chicas no veían eso de él o su personalidad. Bueno, sinceramente, su personalidad tampoco ayudaba mucho. Se sentia como un gato que solo gruñe y gruñe.

En fin.

Se sentaron en el espacio favorito del rubio; al lado de un ventanal pero al fondo para que no hubiera tanta luz solar porque o si no Kenma se quema. No tardó mucho en llegar la alegría del lugar; Hinata. La verdad es que sonrió, le caía bien y si Kenma le tenía confianza, él también.

- ¡hola! Yo sabía que vendrías Kenma, sabía que no te ibas a perder está oferta ¡Y estás de suerte! Te guardé un pedacito porque ya casi no queda nada - soltó un risita cómplice y algo avergonzada, no quería pensar en como se pondría el humor de Kenma si supiera que no había más - ¡Ah! Y hola Yaku, perdón por...no verte!

- Idiota somos del mismo tamaño - gruño-

- no es cierto yo soy ma-...si, tienes razón - mejor no meterse en ese tema tan sensible. Yaku ya lo estaba mirando amenazante -

- Ya idiota, deja atender a los "clientes" que son tu amigo pelo de maíz  y el duende ese - ah sí, ahí estaba el cara de pescado, Kageyama. El amor, el amor, tan ciego - siempre lo mismo contigo que interrumpes mi trabajo

- Yo no interrumpo nada, yo soy parte de tu trabajo, te mimo y te apoyo

"Aquí empezamos de nuevo" pensaron Kenma y Yaku a la vez.

- mimarme no es tirarme de las mejillas para que sonria idiota

- espantas a medio mundo con tu cara fea

- tu eres feo con ese pelo, quien te crees ¿El chuky?

- ¡Es natural!

- ya cállense - Al fin habló Kenma, al parecer recién estaba procesando todo desde que había llegado porque ninguna palabra salía de él, solo observaba como ardía el mundo. Su cerebro era como un...Windows del noventa. Y solo pensaba en ese pastel. DIOS MIO, denle el pastel. - quiero el pastel de chocolate en oferta por favor

- a la orden - habló el pelinegro más calmado ignorando totalmente a Hinata - y tú Duende?

- me llamo Yaku, cara de pescado. - rodó los ojos. Sabía que todo iba a estar revoltoso, más con estos dos - quizás quiero unos croissant...son mis favoritos

- bien...algo ma-...-

no obstante un golpe de la puerta de entrada los interrumpió. No fue nada que en un segundo hubo una estampida de gente con sus camaras de los celulares sacando fotos y ¿por que hasta nishinoya estaba saltando para sacar fotos? ¿Por qué tanto gritorio?

- ¿Que está pasando? - se unió Sugawara que no sabía nada pero uff esto si estaba atrayendo clientes, más para los...sueldos de estos - de la nada oí ruido y vine hasta acá

- No lo sé Suga, no veo desde aquí, menos Kenma y Yaku, por obvias razones - contestó Hinata, hasta que Nishinoya corrió hacia ellos-

- ¡Es él, es él! - sus ojos parecían estrellas por solo ver una -

- ¿Quien? - preguntó Yaku. En serio este día no podía estar más ruidoso - ¿Brad pitt?

- no tonto ¡Lev! Haiba Lev - saltó nishinoya y volvió con la multitud. Hasta Sugawara se unió -

- no, definitivamente no sé quién es. -

Y ahí estaba el supuesto modelo famoso. Alto, muy blanco y si que tenía una cara tonta, pero no estaba mal...no estaba muy mal. Sólo sé preguntaba y demás que todos se preguntaban

¿Que estaba haciendo en la cafetería Dulce de limón?

¿Por qué un famoso vendría a visitarlos?

¿Y a interrumpir de esa forma tan irrespetuosa?

🥐🥐🥐

Al fin una nueva historia :3 quizá igual me demore en actualizar por mis estudios pero siento que estará bien bueno jijijiji.