Pequeño cantante

•13|Visitas inesperadas(2/2)•

Quiron buscaba de lado a lado a Argos ¿Donde se habría metido? Era lo que más se preguntaba el centauro.
Mientras caminaba por el bosque, sintió un movimiento entre unos árboles.

-¿Argos?- preguntó Quiron.

De entre los árboles, aparecía Argos, quien salia temblando.

-...¿Estás bien?- preguntó Quiron, preocupado por la situación de su amigo.

Argos negó.

Quiron se puso a pensar un poco.

-...¿Fue por el señor Hermes, verdad?- preguntó Quiron.

Argos se estremeció.

-Está bien, está bien...ya no esta aqui- dijo Quiron, calmando a Argos.

Los ojos de Argos miraron para todos lados y, al no sentir a nadie, se relajo.

Quiron, al notar que Argos ya estaba relajado, sonrió.

-Vengo a pedir tu ayuda- soltó Quiron.

Argos lo miró de inmediato.

-Verás...invitamos a la madre de Percy al campamento y...necesitamos que alguien la traiga- dijo Quiron.

Argos se quedó pensando un poco.

Al rato, asintió, demostrando que aceptaba ir a buscar a Sally.

Quiron sonrió.

-¡Muchas gracias, Argos!- agradeció Quiron con una sonrisa amplia.

Bien, ya estaba todo listo.

~🌊🔱~

Sally ya estaba arreglada, tenía una mochila lista, estaba duchada y desayunada, ¡Esta perfecta!

Ahora, era esperar a ese señor Argos.

Salió del apartamento, asegurándose que no le faltara nada, llegó al primer piso, donde se despidió del guardia y salió a la calle.

Estuvo esperando ahí quizás algunos minutos, cuando una camioneta se detuvo frente a ella.

De la camioneta, salió un hombre que sorpendio a Sally...

Tenía millones de ojos...

Sally no podía contar la cantidad de ojos que tenia, tan solo podía decir que tenía demasiados ojos...

Y al parecer era la única que lo veía...
Pensaba que era gracias a la niebla, la cual bloqueaba lo mitológico de los mortales.

-Un gusto, señor Argos, soy Sally Jackson- saludo y se presentó Sally, se acercó donde Argos y extendió su mano.

Argos agarro la mano de Sally y, en vez de dar un apretón, se inclino ante ella.

-Oh...que amable, gracias- agradeció Sally.

Argos se separo de Sally y le abrió la puerta de la camioneta, le ayudó a guardar la mochila y cuando Sally se subió, emprendieron viaje.

~🌊🔱~

Sally era una mujer que AMABA hablar sobre su hijo.
Así que si, Argos ahora sabia casi todo de Percy como bebé...
Él tenía que admitirlo, oír eso era tierno, saber las cosas tan adorables que hacía Percy de pequeño le daba ternura.

Al momento que llegaron a los límites del campamento, Sally salió de golpe de la camioneta, emocionada.
Detrás, le siguió Argos, quien sostenía la mochila.

-...Lo siento...- se disculpo Sally, notando que olvidó su mochila.

Argos negó, demostrando que no le importaba.