GO YOUR OWN WAY ━━ markhyuck

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La mudanza de Minghyung hacia el departamento de Donghyuck había sido rápida, porque el mayor no había desempacado muchas cosas desde que había llegado de Canadá, y en solo 24 horas, el mayor ya se había apropiado totalmente de la habitación vacía en el departamento del menor.

Tener a Mark, literalmente, al otro lado de la pared de su habitación, hacía las cosas bastante complicadas para Donghyuck, comenzando por el hecho que tendría que verle la cara cada mañana y cada noche; y segundo, dejando su lado más primitivo salir, no podría tener intimidad en su propio departamento.

Y, considerando que se encontraba en la flor de su juventud, tan solo pensar en ello le estresaba.

Donghyuck dejó una bolsa repleta de chucherías que había comprado en la tienda de conveniencia ubicada en la esquina de la calle donde vivía, preparándose un ramen y tteokbokki de preparación instantánea, abriendo una lata de cerveza y caminando por el pasillo, deteniéndose frente a la puerta de Mark y tocando dos veces antes de abrir.

—Oye, Lee—Haechan se apoyó en el marco de la puerta, mirando al mayor. Mark se alejó de su escritorio, sacándose sus audífonos y mirándole con atención detrás de los lentes ópticos que utilizaba cuando leía o estaba frente a la computadora. El menor bebió un sorbo de su cerveza para despejar su mente—. Compré comida, por si tienes hambre.

Patético, patético, patético. Se sentía patético siendo amable por inercia con él, pero era inevitable cuando es una actitud que tenía desde pequeño.

—¿Estás bebiendo alcohol?—Mark se levantó de su silla, y no tardó más de cinco segundos en quitarle la lata—. Eres muy pequeño para beber alcohol.

—Soy un año menor que tú, Minhyung—Donghyuck le miró incrédulo, y más cuando el contrario se limitó a beber de la misma lata con naturalidad—. Eres desagradable, ¿Lo sabías?

—Hm, no lo creo si viene de ti—Mark sonrió ampliamente—. Vamos a comer, tengo que seguir estudiando.

Haechan rodó los ojos y regresó a la cocina, tomando los dos recipientes de comida que le pertenecían y una botella de agua del refrigerador, sentándose en una de las sillas de la isla conectada a la cocina.

Con su celular en manos mientras comía, ignoró los movimientos de Mark, también ignorando su presencia cuando se sentó frente a él.

Un mensaje de Jeno apareció en la parte superior de su celular mientras miraba videos random en Instagram, sin tardar en entrar al chat.

"LEE DONGHYUCKKK, ¿Olvidaste la fiesta?"
"Renjun te está esperando y no veo tu sucio trasero aquí"

Miró el reloj en su celular. Las 10:30 PM, no era muy tarde.

El menor se apresuró en terminar su comida y se levantó de golpe, caminando rápidamente a su habitación para cambiarse de ropa, agradeciéndose a sí mismo por haber tomado una ducha antes de ir por comida. Reemplazó la camiseta y los pantalones de chandal que traía, colocándose un pantalón de cuero y una  camisa cualquiera junto a su chaqueta de cuero favorita. Maquilló sus ojos en tiempo récord y salió de su habitación luego de colocarse perfume.

—¡Mierda!—Haechan maldijo cuando, apenas salió de su habitación, se encontró con Mark, quien no apartó los ojos de él—. Intenta no asustarme a la próxima.

—¿Dónde irás?—Mark sonrió, fingiendo inocencia.

—Iré a una fiesta—Murmuró Haechan. Miró de pies a cabeza al mayor, dándose cuenta que también se había cambiado—. ¿Acaso no tenías que estudiar?

—Puedo hacerlo mañana, Jeno me invitó a la misma fiesta que irás—Mark se encogió de hombros—. También te lo habrá dicho.

—Si me lo hubiera dicho no estaría preguntándote—Añadió el menor, pasando junto al chico para tomar las llaves de su auto—. Vamos, solo te llevaré, pero no me haré responsable si no regresas.

—Que amable, Lee Donghyuck—Las palabras de Mark salieron con ironía. Los dos chicos abandonaron el departamento, dirigiéndose al estacionamiento del edificio—. ¿Tus amigos saben que nos conocemos de antes?

—¿Deberían?—Donghyuck miró a Mark con atención, viendo que el mayor no dijo nada—. Ya sabes, siempre dicen "pasado pisado", creo que se aplica a esto.

—Yah, eres cruel, Hyuckkie—Comentó Minhyung, subiemdo al asiento del copiloto apenas estuvieron junto al auto de Donghyuck. El menor no tardó en conducir, saliendo del estacionamiento y dirigiéndose a casa de Jeno—. Ahora entiendo porqué creían que mentía con eso el viernes durante el almuerzo, ¡No creyeron que te gustaba!

Donghyuck tuvo que respirar profundamente al recibir tal información, sabiendo que tendría que hablar con sus amigos de manera seria cuando no estuvieran ebrios, además de tener que justificarse frente a ellos. No le gustaba recordar el día en que todo terminó entre Mark y él, pero el mayor parecía actuar sin siquiera meditar bien sus acciones.

El resto del camino fue silencioso y de manera incómoda, solo hasta que llegaron a la lujosa propiedad de la familia de Jeno, donde la música resonaba a gran volumen y con bastantes asistentes. Haechan estacionó su auto en el lugar que siempre reservaba su mejor amigo para él, sin tardar más en alejarse de Mark como si poseyera alguna clase de enfermedad, comenzando a buscar a sus amigos entre la gente.

Logró ver a Jeno y a Jaemin devorándose entre ellos en una esquina de la gran sala de estar, mientras que Chenle bailaba junto a un chico desconocido para él, por lo que decidió buscar a Renjun ahora, encontrándole sentado en un sofá, con la mirada fija en su celular.

—¿Acaso no hay nadie digno de bailar contigo esta noche, Renjunnie?

El mencionado alzó su cabeza al instante, levantándose de golpe al verle. Haechan creía que era de emoción, pero solo notó una mueca de angustia en su rostro.

—Hyuckkie, algo le ha sucedido a mi gato—Comenzó el chino, mordiendo su labio inferior—. Solo estaba esperando verte, pero ya tengo que irme.

—¿No necesitas que te lleve?—Haechan no tardó en hablar, a pesar que su emoción por esa fiesta había disminuido a niveles negativos—. Puedo ir contigo si necesitas apoyo.

—No es necesario, Sicheng ha venido por mi—Donghyuck sintió el rápido beso que dejó Renjun en sus labios—. Pero nos veremos el lunes, ¿Está bien?

Donghyuck asintió con su cabeza, y acompañó a su chico hasta las afueras de la casa de Jeno, viendo como Renjun se iba junto a su primo.