Quackity sangraba, no de manera literal, pero su interior estaba lleno de cicatrices sangrantes que lo ahogaban, las noches eran lo peor que podía pasarle, intentar dormir pero tener que buscar todas las maneras posibles para silenciar a tus pensamientos
- No fue mi culpa, él era un desquiciado - Hablaba consigo mismo manteniendo la mirada fija sobre el techo, la tenue luz de la luna entraba por los espacios de cortina mientras su gato descansaba sobre su abdomen - Entiendeme Lyly, yo no era el problema, ¿O si? - Su rostro cansado reflejo terror, el gato ronroneo al ser acariciado y termino por acostarse sobre el rostro del chico
Su noche no fue nada agradable, las pocas horas que sus ojos se cerraron no eran un descanso ni mínimamente decente, pero iba con toda la energía del mundo hacia la florería, aún mantenía la capacitación con el señor Pol antes de que esté confiara en dejarlo solo
Tuvo que esperar antes de entrar ya que un cliente estaba por salir, entonces reconoció la cabellera castaña de este - El mismo cliente de siempre - Hablo animadamente ya estando cercano al mostrador, la mirada de Pol y la de Quackity se fijo sobre el castaño subiendo a su motocicleta
- Borja - Quackity giro la mirada hacia el señor mayor intentando prestarle más atención cuando el castaño había arrancado para rodar hacia su destino - Supongo que serán para el jovencito que venía con el unos años atrás, tenían bastante tiempo juntos -
El azabache asintió ligermente fingiendo que entendía la situación, solo levantó sus hombros para restarle importancia e ir a dejar sus cosas en la bodega para ponerse su mantel especial donde guardaba las tijeras y un par de cosas más, aunque tuvo que despeinar sus cabellos al no poder sacarse de la cabeza lo sedoso que se veía en cabello de ese tal "Borja"
En la semana que tenía trabajando, lo había visto unas tres veces, pero siempre llegaba y se iba, Quackity solo sabía que había llegado por lo reconocible que eran sus cabellos, un castaño algo claro y brillante, esponjoso y algo despeinado seguramente a la hora de quitarse su casco, pero no podía recordar nada de su rostro, no le había puesto la atención necesitaría a algo que no fuera solo su silueta, probablemente era culpa de su astigmatismo lo que volvía borroso el rostro ajeno - Nunca - Se dijo a si mismo dejando los lentes que siempre llevaba, pero nunca usaba por más que los necesitara
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Las canciones de la multimedia no tienen nada que ver con el contenido del capítulo, pero pues es todo Speak now pipipi
