capitulo 6

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JUNGKOOK;

— ¿A dónde vamos?—

Tengo en la punta de la lengua decir a casa
Pero no le contesto. No quiero asustarlo. El olor a fresas
silvestres llena el interior de la cabina del camión. No ayuda a que mi
polla baje.

Eso no ocurrirá pronto. Y menos con el tan cerca. Pero no tenía
otra opción. No había forma de que me quedara parado mientras Jimin
salía a pescar un hombre.

Estoy aquí si Jimin  necesita uno.

— ¿Quién era él? No lo vas a volver a ver. —

¿Qué mierda me
pasa? Sé que estoy siendo un imbécil prepotente, pero parece que no
puedo detenerme, y Jimin  no parece estar demasiado molesto por mi forma de actuar.

El control que alguna vez tuve se ha roto en mil
pedazos. No hay forma de recuperarlo, y lo sé.

Esto ha tardado mucho
en llegar. Es mío.

— ¿Quién?— levanta la barbilla en claro desafío. Ahí está mi
pequeña fiera.

Estaba esperando. La imagen de parar el camión y tirar
de jimin  en mi regazo para azotar su culo inunda mi mente.

Es una
fantasía que solo Jimin  puede arrancarme. Demonios, el es el  único que puede sacarme alguna,
fantasias las que tengo sobre el lo dejan  con el culo al aire.

—Ya sabes quién. — grité.

Quería dejar a ese cabrón fuera de combate . Me impresionó que estuviera dispuesto a enfrentarse a mí
pensando que era un ex maltratador o algo así.

Se lleva un punto por
eso. Podría ser un buen hombre por lo que sé. El tipo de hombre con
el que Jimin  debería terminar. Uno que no tenga la cabeza llena de traumas
Pero no puedo dejarlo ir. Después de sentirlo contra mí
dentro del bar no estoy seguro de poder volver a respirar sin Jimin  cerca de mi

—Trabajamos juntos. Es un buen tipo. —

sale en su defensa.
Mis manos se tensan sobre el volante. No puedo conseguir que deje su

trabajo, pero podría tener otra visita con él. Me relajo un poco, ya
haciendo un plan de futuro sobre cómo manejar esto.

—Puede que sea un buen tipo, pero no es para ti.

—Sabes que no eres mi hermano. O mi padre. Ni siquiera mi
amigo. —

Ladea la cabeza para mirarme. Sus palabras me hieren
profundamente, pero me merezco esa mierda. Me he esforzado por
evitarlo todo lo posible.

—Sí, jodidamante lo sé. —

sé más que esa mierda. Me arruinó
hace mucho tiempo. Me volvió loco. Consumió muchos de mis
pensamientos. Su rostro fue lo último que vi cuando pensé que la muerte  venía por mí rodeado de arena e infierno.jimin  era todo lo que
podía ver de pie frente a mí. Me aferré a el. Cuando me sacaron del infierno  supe que era jimin  el  que me mantenía vivo.
También sabía que estaba jodidamente enamorado de Jimin . Pero
soy un hombre roto. Demasiados demonios vienen por mí por la Noche ,Jimin  no necesita esa mierda, pero aun así sigo conduciendo
hacia mi casa.

—jungkook  — Su mano baja en mi brazo. Su voz está llena de
dulzura. Apuesto a que su boca es aún más dulce.

—Sí, ¿chico de los sueños?—

Su toque hace caer demasiadas de
mis paredes. Me hace pronunciar palabras que nunca había dicho en
voz alta. Sus dedos presionan más dentro de mí.

— ¿Chico de los sueños?

—Lo siento. Se resbaló. —

Su mano cae de mi brazo. Me gustaría
poder ver mejor su cara. A menudo es fácil de leer, y sus emociones
se muestran en toda su cara al igual que la de TAE.

— ¿Un resbalón? ¿A quién llamas así entonces?—

Si no me equivoco  creo haber escuchado un poco de lo que sonó como celos.

Deja escapar una pequeña risa que creo que es forzado para intentar disimular

—Te quedarás conmigo esta noche. —

Ignoro su pregunta, no
quiero mentirle. Lo que le dije la semana pasada todavía me arde por
dentro. Yo fingiendo que no sabía que había vuelto a casa. Lo supe en el momento en que volvió a entrar en Bussan

. Sé tanto sobre Jimin que  probablemente lo asustaría y lo haría correr.

—Pero...— Se queda en blanco cuando llegamos a la puerta y se abre

— ¿Vives en un almacén?—

me pregunta mientras paso por
delante de un puñado de ellos. Esta vez sí que entro en el garaje. No
me espera. Se desabrocha el cinturón de seguridad y sale de mi camión. Abro la puerta para que entre en el vestíbulo que se encuentra
al pie de las escaleras.

Algo dentro de mí se calma cuando la puerta se cierra tras de jimin

Saber que está aquí, en mi espacio, donde debe estar, me tranquiliza.

Me inclino hacia Jimin  y abro la cerradura. Inclina la cabeza hacia atrás
para mirarme.

—Lo has construido tú. El diseño que dibujó tu hermano.

Asiento. Fue un diseño que se le ocurrió a jimin y al que mi hermano dio  vida con sus manos. Luego lo llevé más allá. Me colgué de cada
palabra que Jimin  decía mientras explicaba la idea.

— ¿Por qué?

—Me gustó la idea. — Lo hice, pero era algo mucho más que eso.

Creo que en algún nivel estaba construyendo un futuro con Jimin . Uno que no creía que pudiera tener nunca.

Sus labios gruesos se separan.
Sus ojos se dilatan. Sé que no tiene miedo de mí. Está excitado. Me acerco a el, empujándolo hacia la puerta, necesitando sentirlo
contra mí.

— ¿Jungkook ?— Sus manos se acercan a mi pecho. Su lengua sale,
mojando su labio inferior. Es la gota que colma el vaso de mi
autocontrol.

—Me vuelves loco. — le digo antes de tomar su boca. Mis manos
se dirigen a su culo para levantarlo de sus pies. Jadea para mí, y lo Tomo  todo.

He esperado años para probarlo, y no voy a perder ni un segundo más...

!VOLVI A CASA POR EL !!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora