«Confrontación» Radiostatic fanfic

V

Leía cómodamente el periódico, una edición antigua tal vez. Siempre había algún puesto de su época dispuesto a vender el New York Times o The Wall Street Journal; el que fuera, servía bastante para recordar esos bellos momentos donde paseaba por las calles de su tan amada Nueva Orleans.

Dio un sorbo a su taza de café negro, con el rosa descolorido por el uso.
Levantó ligeramente la mirada y vió una cabellera roja por encima del periódico.
-¡Alastor! ¡Alastor! Mira lo que encontré.

Niffty estaba en cuclillas encima de la mesita colocada estratégicamente en la terraza. Vestida con su habitual trajecito rojo y su delicado delantal, que parecía más colorido que antes.

Hizo un ademán para indicarle que la estaba escuchando.
-Estaba limpiando tu habitación, y, y los libros de tu estantería cayeron, y entonces, los abrí y...
Niffty tartamudeaba de la emoción.
-¿Qué pasa querida Niffty, que te tiene tan exaltada?
-Esto Alastor.

La delgada mujercita le entregó a Alastor una fotografía. Estaba rasgada por la mitad y bastante amarillenta.

-¿Quién es él Alastor? ¿Un amigo tuyo? ¿Crees que le gustaría ver mi show de cucarachas?
Sosteniéndola con delicadeza, Alastor apreció bien el rostro de su viejo amigo. Su tonta caja de imágenes.
-Vox.

Hacía tanto tiempo que no pronunciaba ese nombre. Ese conjunto de letras habían perdido todo sentido para él. Una amistad que el creía indestructible.
-Alastor, quiero que hagamos algo diferente.
-¿De qué se trata?
Vox abrió más los ojos en señal de excitación.
-Quiero que nos tomemos una foto, sólo tú y yo.
-Ay querido, sabes que no me gusta aparecer en otro medio que no sea la radio.
-¡Por favor Al! No tenemos ni un momento juntos. Me gustaría tener un recordatorio tuyo cada que vea esa foto.

Alastor dudó un momento. No le apetecía mucho la idea, pero estaba dispuesto a complacer a su estimado colega.
-Está bien. Pero no quiero que sea en una de las tontas cámaras de tu época.
Dijo jugueteando con Vox.

Que Alastor dejara fotografiarse, era una prueba de auténtica confianza para el demonio de la televisión.
-Ay, sólo alcanzó para una foto...
-No te preocupes querido amigo, que te parece si la dividimos en dos, así tú tendrás mi retrato, y yo tendré el tuyo...
-Oh Al, no hay forma de que rompa esta foto, o nuestra amistad....

Mentiras. Todas y cada una de ellas.
El demonio de la radio volvió en sí y Niffty todavía esperaba su respuesta.
-Oh, esto, sólo es un viejo aliado que tenía por ahí.
-Ya veo. ¿Y sigues en contacto con él?
Alastor dio el último sorbo a su café y miró el casi permanente rojizo del cielo infernal.
-Digamos que la conexión se rompió...