WHO KILLING JEONGIN? [STRAY KIDS|JEONGHO] [TERMINADO]

Capítulo 2: Seo Changbin

En medio de la fría tarde, dos personas estaban por tomar un pequeño lonche; pero el mayor de ambos, no quería ni tocar la comida, no después de toda esa semana morbosa y difícil para él. Que más de una vez le dijo a su compañero que no lo haría, pero Seo continuó insistiendo en que comiera, consiguiendo que Lee aceptara de mala gana.

Igual tenía que alimentarse.

Para vivir.

— ¿No crees que debes salir a tomar un poco de aire Minho? —suspiró mirando de reojo a su compañero de cuarto— Ya pasaron varios días desde que el caso se abrió y ni siquiera has tomado una migaja de pan. Si sigues así, te vas a morir. Enserio, te lo digo.

Sabía que Minho ya no quería vivir. No cuando lo que pasó lo mató.

Y eso era lo que más le pesaba a Seo, que su mejor amigo se viera tan decaído, tan a punto del colapso. Pero era evidente que no lo estaba pasando bien, tanto física como mentalmente. Así que lo único que le quedaba, era estar al lado de éste.

Así lo querría Jeongin.

Minho: Lo deseo Changbin, yo desearía morir, no sabes cuánto lo quiero. Quiero eso. Lo quiero. Me quiero ir con él —dijo el pelinegro mientras tomaba con asco la comida, dejando caer una pequeña lágrima en ella. Salada y rota— ya ni sé porque sigo respirando —sonrió con pesadez— lo extraño, extraño verlo reír en esa silla con un puchero que yo besaría, quiero verlo haciéndome berrinches, sonriendo como nunca antes al ver su serie favorita... Pero no. Un idiota debió matarlo y aún no se hace cargo de sus acciones. ¿Por qué debió acabar con su vida? —apretó su tenedor— si tan solo supiera quién- yo tal vez podría hacer-

Changbin: Tal vez fue un accidente Minho, ¿no lo crees?

Lo interrumpe.

Comiendo dice aquel peligris mientras mueve su cuchara con un poco de inquietud, guardando en su memoria la imagen dolorosa de aquel día en que todos asistieron a esa dichosa fiesta, recordando a aquel asesino que formaba parte de su grupo de amigos.

Un ángel, según todos.

Un demonio, según él.

Ese fue aquel que tomó el arma homicida e hizo que la persona que amaba lo ayudara con su delito. Tal vez por miedo, tal vez por... No. Él estaba seguro que la persona que amaba había sido convencida por éste. Porque él no sería capaz de hacer semejante cosa. No. Nunca haría semejante delito.

O eso pensaba Changbin, porque, en fin, estaba enamorado de Kim Seungmin. Y él no era un mal chico.

Él era el mejor.

"Mensaje entrante..."

Leyó en ese momento su celular, observándolo en la pantalla prendida. Al, sus ojos, hacer contacto con Minho, los desvió rápidamente, carraspeando su garganta, levantándose para caminar hasta afuera de su casa, desbloqueando su celular y entrando a aquel chat en KakaoTalk. Era él, lo sabía. Apretó sus puños y empezó a ver y leer el mensaje una y otra vez.

●En línea

Número desconocido
Se que piensas hacer, Seo. Pero es mejor que te calles si sabes algo. No creo que quieras que te pase lo mismo que le pasó a Jeongin, ¿verdad? Y piénsalo bien, antes de hablar.

Changbin
Agh. No sé por qué me escribes.
¿Acaso no tienes ningún remordimiento?
Mataste a tu amigo, mataste a la persona que alguna vez quisiste.
Aun así, ¿sigues diciendo esto?

Número desconocido
¿Me hablas de amistad, amor, culpabilidad?
Seo Changbin, sé muy bien lo que escondes de Seungmin. Sé cómo lo cubre de sus cosas porque estás enamorado de él. Sabes que, si hablas, él perderá todo, ¿cierto?

Changbin
Eres un asco en verdad

Número desconocido
Me lo dicen muchas veces :)
Pero sólo te digo algo, es mejor que te calles, sino quieres que Seungmin termine peor que Jeongin ;)

El usuario se ha desconectado.

Ante esos mensajes, Seo Changbin no sabía que pensar, pero tenía que ponerse en contacto con la única persona que podía ayudarlo, el hermano del mejor amigo del asesino, o uno de sus amigos también. Tal vez y con suerte, entre ellos podían ayudarse a enterrarlo en sus mentiras, o tal vez, encubrirlo aún más. No sabe qué pasará, pero ayuda, es la que necesita ahora. La que los siete necesitan.

Y ya.

[...]

Por otro lado, estaba un chico pelinegro tratando de escuchar a su amigo hablar por celular. Con un suspiro entró otra vez a casa, viendo su pantalla, buscando entre sus contactos a esa persona que siempre estuvo al lado de Jeongin, su primo, Hwang Hyunjin. Tal vez podría encontrar una prueba con él, tal vez sea una llave para avanzar más con la investigación. Tal vez para aclarar su vida.

Antes de volverse más loco.

"Voy a resolver esto Jeongin, lo haré" —pensó Lee antes de tomar sus cosas y salir sin que su mejor amigo se diera cuenta de su falta en esa casa. Ahora sólo tenía una meta y era encontrar al culpable, o a los culpables de este crimen. Haría que paguen poco a poco.

Poco a poco como las sucias ratas que son. Esto no se quedará impune. No.