Miguel
Salí tarde del examen ya eran las 10:15, mi madre se iba a enfadar si llegaba tarde, fui a casa para cambiarme el uniforme y ducharme. Me puse unos pantalones con unas bans y una camisa, lo primero que encontré ya que no tenia mucho tiempo.
Llegue a la clínica a las 10:27 menos mal aun quedaban 3 minutos. Me dirigí al despacho de mi madre donde hacia las consultas, ya sabia el camino de memoria.
Cuando estaba frente a la puerta se oía como mi madre me estaba maldiciendo por llegar tarde caminando de un lado a otro, para vengarme espere hasta y media, no fue mucho pero me divertí oyendo a mi madre detrás de la puerta.
Se hicieron las 10:30, no espere mas y toque la puerta. Enseguida me habrio la puerta. Lo primero que vi fue a mi madre dando un suspiro de alivia después me hizo una señal de que podía pasar dentro.
Paso y doy un rapido vistazo a toda la habitación; vi el escritorio de mi madre y delante de este una cama pegada a la pared de la cual entre las sabanas sale una cabecita de color castaño clarito, mi madre me interrumpe la inspección y me habla en susurros.-Lo he dejado dormir...
Mira otra vez hacia la camilla, por si se había despertado pero parece que no, entonces miro estraño a mi madre y me dice.
- Bueno yo ya me voy, regresaré cuando queden cinco minutos....- se acerca a la puerta y se despide con la mano.
Q?¿- pienso sin hacer ruido - vengo y ahora me deja??, y ahora que coño hago?¿ -me quedo mirando alrededor mio - joder mama- me acerco a la cama y observó al que en un futuro cercano va ha ser mi más que mejor amigo aunque yo aun no estoy del todo deacuerdo a este trato. Doy un pasito hacia atrás justo cuando lo observó de cerca - parece una pelotita!!- estaba acurrucado dentro de la cama y lo que me impresiono mas fue que lo que ocupaba de la camilla era un trocito y eso que la cama era pequeña de las que solo puede caber una persona pero con el dentro aun cabe otro mas bien si ponemos cuatro como él en forma de bolita como ahora esta él, cabrían perfectamente! Di un paso hacia delante aun no me creía que tan era, creo que mi madre ya ha hecho de las suyas otra vez, seguro que no tiene un año menos, por su estatura debe tener 10 años!, mi madre tendrá que responder a algunas preguntas, pero eso tendrá que esperar.
Me acerco a su cara, poso mi mano con sutileza en su cabeza el responde enseguida acurrucandose más y comienza a temblar un poco, casi nada diría yo porque estoy cerca de él que si eso no lo habría notado. Levanto un poco la mano y solo con las llenas de los dedos voy recorriendo su cara desde su cabecita a su pómulo y voy bajando él se mueve un poco pero lo dejo pasar y sigo, voy bajando hasta su cuello y luego empiezo a subir desde su clavícula y repito el mismo movimiento, se va acostumbrando a las caricias y se remueve en las sabanas y se pone recto, paro para ver si se despierta, le miro pero sigue dormido. Vuelvo ha hacer el mismo movimiento descendente y cuando llegó a su cuello hace un sonido casi insonoro - parece un niño pequeñito mejor dicho un gatito que ronronea - voy acariciando su cuello y él acerca su cabeza a mi mano para que le siga tocando en esa zona, hago lo que me dice inconsciente, pero antes me siento con cuidado a un lado de la cama.
ESTÁS LEYENDO
El trato (yaoi)
RomanceEsta historia trata sobre un chico el cual es hetero pero que poco a poco va cambiando por los sentimientos que surgen tras conocer a Sergio el cual es tímido y muy reservado que necesita ayuda para salir del hoyo que el mismo ha cavado.